Formiche Alto busca una empresa para amueblar su hotel rural, que quedará así terminado

Formiche Alto quiere acabar por fin su hotel rural, un proyecto que se inició hace más de dos décadas y que se ha hecho en numerosas y sucesivas fases, siempre con ayuda externa para no esquilmar las arcas municipales. En conjunto, se ha invertido cerca de un millón de euros a los que hay que sumar los más de 200.000 de presupuesto con los que cuentan ahora para dotar el edificio de mobiliario y decoración las diferentes dependencias.

El proyecto se redactó en el año 2022 y algún tiempo después se iniciaron las obras del nuevo edificio, que está construido junto al río Mijares, con vistas al puente medieval desde una buena parte de las habitaciones con las que cuenta el inmueble.

Dispone de un total de doce habitaciones, todas ellas con capacidad para, al menos, dos camas. Además, algunas de ellas están comunicadas entre sí y separadas por una puerta del resto, por lo que resultan una buena opción para las familias que viajan con niños pequeños.

El comedor, con grandes ventanales sobre el Mijares, tiene acceso desde el interior del hotel y también desde el exterior, de forma que puede atender a clientes que no estén alojados en el establecimiento. Dispone de una cocina que ya está totalmente equipada con electrodomésticos y en la que también ha habido que hacer reformas desde que se construyó para adaptarla a la nueva normativa.

El alcalde, José Luis Escriche, plantea que cuando comenzaron el proyecto ni siquiera había ascensor en el edificio, que se proyectó como un hotel rural. Ahora sí cuenta con uno, además de adaptarse a la normativa de incendios para este tipo de establecimientos con la colocación de nuevas puertas.
 

Aunque se trata de un hotel que contará con todas las comodidades, es muy espacioso y tiene el encanto del lugar donde está ubicado, el arquitecto responsable del proyecto, Miguel de Haro, señala que buscarán que sea un establecimiento de dos estrellas puesto que, aunque “podría tener más porque la superficie es importante”, los servicios que requiere esta categoría son mucho menores a una superior y exigen menos personal.

El hotel cuenta con 1.200 metros cuadrados construidos y se ha hecho en numerosas fases, algunas de 100.000 euros y otras de apenas 20.000, según indicó el arquitecto responsable de la obra.

Calefacción de aerotermia

Otra de las modificaciones que se llevó a cabo sobre el diseño inicial fue la calefacción, que será de suelo radiante por el sistema de generación de calor por aerotermia de agua caliente. Se trata de un sistema más eficiente que se abastece de energía eléctrica y, a través de una bomba, comprime el aire y se calienta el agua que circula por el circuito. “Es el sistema más eficiente que hay hoy por hoy, puesto que aunque su instalación es costosa, tiene un rendimiento muy alta”, argumenta el arquitecto.

El alcalde precisa que cuando iniciaron el proyecto, a comienzos del presente siglo, no había opciones de alojamiento en Formiche Alto, localidad que ahora cuenta con un albergue, un camping y varias casas rurales.

Además, el establecimiento cuenta con una zona de spa con relajantes vistas al río y al monte situado enfrente.

Ahora el consistorio confía en encontrar a unos buenos gestores para el hotel rural e iniciará todos los trámites ya en estos meses, para que una vez que esté totalmente amueblado se pueda abrir al público. “De momento ya han venido algunas personas interesadas y les ha impresionado la localización y el enclave”, relata el alcalde. En la planta baja, al lado de la recepción, hay un pequeño apartamento diseñado para alojar a los gestores si así lo desean o alquilarlo a clientes que buscan este tipo de alojamiento.

José Luis Escriche reconoce que encontrar buenos gestores es el paso más complicado, y eso que llevan dos décadas para sacar adelante la obra. Indica que se ha prolongado tanto en el tiempo porque lo han hecho a través de ayuda económica externa, como la obtenida mediante el Fondo de Inversiones para Teruel, con el fin de no endeudar al Ayuntamiento.

Aire íntimo y personal

La última fase de las obras, que se iniciaron hace ya más de dos décadas, es la dotación de mobiliario y textil de las diferentes habitaciones y zonas comunes, que tendrán un “aire íntimo y natural” de forma que el huésped se sienta como en casa y que la decoración parezca “mimetizada con el entorno”.
 

El presupuesto base de la licitación ronda los 215.000 euros, impuestos incluidos, y el contrato está ahora en proceso de licitación. La apertura de las propuestas será el próximo día 14 de noviembre y el plazo de ejecución de los trabajos será de cinco meses desde el momento de la adjudicación.

El pliego de condiciones para el equipamiento plantea que habrá seis tipologías de mobiliario diferenciadas para dar una estética diferente a cada tipo de habitación. También se incluye en el presupuesto el equipamiento del apartamento destinado al conserje, donde ya está totalmente instalada la cocina.

Zonas comunes

Además, también incluye la colocación de los elementos y decoración de las zonas comunes, entre las que están tres salas de estar –una en la planta semi sótano, otra en la planta baja y una más en la segunda–, la cafetería y restaurante de la primera planta y los distribuidores de habitaciones de los que hay dos. Por otro lado, el pliego también incluye la iluminación, decoración y textiles.

Para buscar el mobiliario más acorde a las necesidades se ha tenido en cuenta el “enclave privilegiado en el que se ubica el inmueble”, según figura en el proyecto, para “no alterar la belleza natural y la armonía con la que cuenta”. El objetivo es lograr un espacio acorde a las necesidades, que tenga un carácter práctico y funciona, con una “estética actual y contemporánea y un aire elegante, sofisticado, íntimo y natural”, porque lo que se busca es que “el usuario se sienta como en casa”.

En el proyecto incluido en la licitación plantean que han tratado de completar el espacio existente adaptándolo a las tendencias actuales y mimetizando la estancia a su entorno.

Otro de los aspectos que se ha tenido en cuenta es la búsqueda de materiales de calidad “que permitan conseguir un resultado satisfactorio, un mantenimiento mínimo y una durabilidad prolongada en el tiempo”, especifica el proyecto de equipamiento.