La Federación de Caza descarta patologías en las perdices de Teruel

Ni gripe aviar, ni la enfermedad de Newcastle ni el virus Baganza está presente en las perdices de la provincia de Baganza está presente en las perdices de la provincia de Teruel. El informe serológico que ha llevado a cabo la Federación Aragonesa de caza en el que se han analizado 126 muestras de perdices recogidas en 41 municipios diferentes ha concluido que ni en la comunidad aragonesa ni, por tanto, en la provincia de Teruel, hay casos de gripe aviar ni de la enfermedad de Newcastle, aunque se confirma la exposición a un ortoflavivirus en tres de las muestras que proceden de zonas geográficas distintas.

En la provincia de Teruel, las 44 muestras analizadas han arrojado todas resultado negativo en las tres enfermedades analizadas, confirmó a DIARIO DE TERUEL el delegado de la Federación Aragonesa de Caza en la provincia de Teruel, Manuel Beltrán. “Sale todo limpio”, aseguró el responsable federativo. Solo tres muestras resultaron seropositivas, las recogidas en Carenas, San Martín del Moncayo y Castilliscar, todas en la provincia de Zaragoza.

“La detección de anticuerpos frente a flavivirus señala la circulación de estos virus en la perdiz roja. Este hecho tiene implicaciones ecológicas y de salud pública ya que, virus como el VNO puede tener un impacto en las aves silvestres, como reservorio, y en caballos o en humanos, como huéspedes accidentales. Este hecho sugiere un riesgo potencial de trasmisión y deberían considerarse futuras investigaciones que incluyan la identificación molecular para confirmar la especie viral y ampliar la vigilancia con un mayor muestreo que implique, aumentar el número de animales y regiones geográficas.”, concluyó la Federación de Caza.

La Federación Aragonesa de Caza realizó este estudio, que tiene un “carácter puntual”, como reza en las conclusiones del propio análisis, “pensando un poco por los animales que cazamos, qué enfermedades tenemos” y, además, buscando una explicación a “por qué están bajando las poblaciones de perdiz”, explicó Beltrán, que destacó que la Federación “somos los únicos que analizamos estos animales”.

En términos parecidos justifica la propia Federación Aragonesa de Caza la necesidad de haber llevado a cabo este estudio. “En los últimos años ha despertado un notable interés en el ámbito de la conservación y la gestión cinegética, motivado por la necesidad de disponer de información actualizada sobre los factores que podrían afectar a sus poblaciones”. En respuesta a la inquietud por conocer más sobre esta especie, la Federación Aragonesa de Caza ha financiado este estudio “con el propósito de profundizar en el papel que determinadas enfermedades víricas podrían desempeñar en la dinámica poblacional de la especie en Aragón. El objetivo de este estudio es evaluar la exposición de la perdiz roja a virus específicos mediante el análisis de muestras obtenidas por los cazadores durante la temporada de caza 2024-2025”, señala la propia Farcaza entre las conclusiones del estudio.

Recogida de muestras

“Queremos saber qué enfermedades hay en el monte”, afirmó Beltrán, que destacó la importancia de la toma de muestras porque “si no se analiza, pues tampoco sabes, a lo mejor se mueren unas perdices, se las come un zorro y nadie se ha enterado de que se han muerto unas perdices”. El estudio también añade información de anticuerpos, que indica si el animal analizado ha superado un contagio mediante la detección de anticuerpos, lo que informaría de la presencia de la enfermedad en cuestión en la zona.

Para poder desarrollar el análisis, Farcaza recurre a la labor de voluntarios que toman muestras de algunos animales abatidos o encontrados muertos en el monte y los remite a la Federación para su análisis. En esta campaña se han analizado 66 muestras de todo Aragón, de las que 44 correspondían a 17 localidades de nueve comarcas de las diez que tiene la provincia.

Farcaza entregó a los diferentes cotos, que manifestaron su interés en participar en el muestreo, el material necesario para la toma de muestras: papeles de filtro, bolsas de plástico, guantes, pinzas y sobres direccionados para su envío a la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza. Los papeles de filtro se impregnaron con la sangre de cada animal abatido, a partir de los cuales se obtuvieron los eluyentes que posteriormente fueron analizados mediante diferentes kits comerciales de ensayo inmunoenzimático (ELISA) para la detección de anticuerpos.

Descenso de población

La Federación quiere saber el motivo por el que se ha reducido la población de perdices en la provincia. A pesar de que desde la Federación se valora que “la perdiz está muy bien de salud”, lo cierto es que esta afirmación va acompañada de otra, la de que “sin embargo, baja de número”, relató el delegado provincial de la Federación.

“Sabemos que también puede bajar de número por el tema de climatología, tema de cultivos, de predadores, de muchas cosas”, explicó Beltrán, que apuesta por seguir indagando para encontrar la mejor explicación a ese descenso poblacional. “Hay que investigar un poco para saber en qué se lo podía ayudar”, dijo.

Entre los factores que se contemplan para explicar la bajada de ejemplares está, sin duda, la sequía se sufrió los últimos dos años. “Este año hemos tenido una primavera muy buena, tenido ya bastante más perdiz y mucha codorniz”, dijo Beltrán, que argumentó que la bajada en el número de perdices se reparte de manera uniforme por todos los cotos de la provincia.