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La temporada de caza empieza con un número similar de cazadores y muchas más perdices La temporada de caza empieza con un número similar de cazadores y muchas más perdices
Un cazador apunta con su escopeta a una presa. Archivo/M. N.

La temporada de caza empieza con un número similar de cazadores y muchas más perdices

Las abundantes lluvias de la primavera han favorecido la cría de un buen número de estas aves
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José Luis Rubio

La campaña de caza menor, que empezó, como es habitual, a mediados del mes de octubre, promete ser notablemente mejor que las de los últimos dos años. La abundancia de precipitaciones durante la primavera en la mayor parte de la provincia habría propiciado que las condiciones para el engorde y reproducción de las perdices haya permitido que la cabaña recuperase niveles desconocidos en los últimos años. Así l aseguró el delegado en Teruel de la Federación Aragonesa de Caza, Manuel Beltrán, que explicó, además, que se han mantenido las licencias de zaca y que se han incrementado ligeramente el número de escopetas federadas.

“En Aragón somo más de 40.000 escopetas”, dijo Beltrán en relación a las licencias de caza, y resaltó que los aficionados procuran cazar en cotos repartidos por las tres provincias aragonesas, por lo que es complicado provincializar esos datos.

El dato de licencias de caza es superior al de licencias federativas, que en la comunidad autónoma asciende a 28.000, de las que unos 8.000 corresponden a la provincia de Teruel.

Aunque sí que se ha detectado una merma en el número de licencias, que en la comunidad autónoma ha bajado de las 45.000 del año pasado, la cifra de licencias federativas se mantiene. “Si éramos 28.000, seguimos siendo 28.000”, resumió el delegado en Teruel, que resaltó que “la Federación no pierde cazadores aunque a nivel de Aragón sí que se pierden, porque no todos los cazadores que tienen una licencia autonómica de caza no están federados”.

Beltrán reconoció que entre los federados hay poco relevo generacional asegurando que “tenemos muy pocos cazadores jóvenes”, dijo, de la misma manera que destacó que hay “muy pocas mujeres también”. Lo que sí que se mantiene inalterable es el número de cotos. y de sociedades de caza. “Puede variar alguno que se junten varios en uno, pero más o menos los cotos son los mismos que hace muchos años porque la mayoría son el término municipal”, explicó el representante federativo.

Después de dos temporadas realmente malas por la falta de caza, la campaña de 2025 promete satisfacer a los cazadores. Así lo confirmó el delegado de la Federación asegurando que “después de venir dos años muy malos penosos llevamos un año bastante bueno” en el que “se ha notado muchísimo que hay más perdiz”. Así, “en cifras globales, la perdiz está muy bien, se va recuperando”, dijo. También se refirió a los lepóridos. “La liebre se está recuperando de la enfermedad que tuvo de la mixomatosis. Y sobre el conejo, hay sitios donde verdaderamente es una plaga, sobre todo en la zona de Albalate e Híjar”, dijo Beltrán.

Desde la Federación Aragonesa se celebraron las buenas condiciones registradas en la pasada primavera. “Lo más importante es que salga una primavera buena porque cuando sale el verde mojado, que sólo sale cuando llueve, eso para el campo es oro puro. La primavera buena hace que haya cobertura para que los animales se puedan defender, que haya comida verde que es la comida buena que tiene un animal para poder desarrollarse y no coger enfermedades. Y si una primavera es buena hay una cría buena”, explicó.

Además de las condiciones que se dieron durante la primavera, desde la Federación se recuerda que “hay cotos en los que los únicos puntos de agua que hay son los que ponemos los cazadores, tanto sea en balsas como en bebederos”, que se complementan con comida que ponen, además, los aficionados.

En el último patronato de la Laguna de Gallocanta que se celebró coincidiendo con la aparición de los primeros casos de gripe aviar en el entorno del humedal, en el que participaron representantes de los municipios del entorno, de las administraciones provincial y regional y otras organizaciones como la Federación Aragonesa de Caza, se hizo hincapié en lanzar un mensaje de tranquilidad por tratarse de una situación que únicamente afecta a las aves y que cuya transmisión a humanos es prácticamente improbable.

La Federación Aragonesa de Caza se sumó al mensaje de tranquilidad. “Desde la Federación Aragonesa ya llevamos varios años analizando, por ejemplo, perdices, becadas o aves, se llevan analizando aves y no ha salido ningún caso ni que tenga la enfermedad, es más, ni que le haya pasado”, aseguró el delegado territorial de la Federación en la provincia de Teruel, Manuel Beltrán. Más aún, el representante federativo aseguró que entre las muestras de población a las que se había analizado tampoco se había detectado ninguna perdiz que hubiera pasado la enfermedad anteriormente. Regularmente, la Federación Aragonesa de Caza estudia ejemplares de perdiz recogidos de forma aleatoria de forma que “hay años en que se pueden mandar a analizar 20 o 30”, sobre todo en las zonas en las que se pueda detectar que la población “está floja”.

Desde la Federación Aragonesa de Caza se han repartidos a los cotos y asociaciones de cazadores kits para la recogida de muestras de aves y su posterior envío a los laboratorios para su examen. De momento se van a analizar más ejemplares de perdiz con muestras recogidas en los alrededores de la laguna. “Llevamos unas bolsas con unos algodoncillos donde tú cuando pelas una pérdida, donde hay sangre, cuando tú le quites las vísceras, donde hay sangre, coges sangre, lo metes en una bolsa de plástico normal y ya llevamos unos hombres que se mandan a la Facultad de Veterinaria de Zaragoza y donde ahí se analizan”, explicó el delegado de la Federación en Teruel.

Comienza la temporada

El 19 de octubre comenzó oficialmente la temporada de caza menor en Aragón, una actividad que este año generará en la Comunidad un impacto económico de 258 millones de euros y 8.500 puestos de trabajo, según los últimos datos del Gobierno de Aragón. Aragón cuenta con cerca de 54.000 licencias de armas y 45.000 licencias de caza, además de más de 28.000 cazadores federados. La temporada de caza menor se prolongará hasta el 25 de enero de 2026, mientras que la de caza mayor, iniciada el pasado 21 de septiembre, se extenderá hasta el 22 de febrero de 2026.

Recomendaciones

Ante la propagación de aves afectadas por la gripe aviar H1N1, sobre todo entre las grullas y gaviotas en el territorio aragonés, la Federación Aragonesa de Caza junto con el catedrático de Sanidad Animal de la Universidad de Castilla La Mancha, Christian Gortázar, han explicado en sus canales de difusión que se trata de una enfermedad vírica altamente contagiosa en aves (tanto domésticas como silvestres).

La circulación de los virus de la influenza aviar de alta patogenicidad no es un fenómeno nuevo. Es una infección de distribución mundial y las diferentes cepas son más frecuentes en ciertas áreas del mundo que en otras.

Los virus de la influenza aviar se eliminan a través de las heces y las secreciones respiratorias de las aves infectadas, por lo que la enfermedad puede transmitirse a través del contacto directo con las secreciones de las aves infectadas, o por contacto indirecto a través de medios, en especial el agua, contaminados.

La labor de los 40.000 cazadores aragoneses como centinelas de esta enfermedad (y de cualquier otra enfermedad de las especies de caza) es esencial. En caso de encontrar un ave muerta o visiblemente enferma en el campo, no se debe manipular. Después, es importante tratar de geolocalizar el cadáver y comunicar la incidencia a la OCA de la zona.

Explica el comunicado de Farcaza que las aves cazadas con un comportamiento natural y sin presencia de signos clínicos, de forma general, incluso las migratorias, sería raro que fueran portadoras del virus de la gripe aviar. Sin embargo, es recomendable manipular las piezas con guantes.

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