Síguenos
Arranca el Seminario de Fotografía de Albarracín con Divina Campo y Tony Lorenzo Arranca el Seminario de Fotografía de Albarracín con Divina Campo y Tony Lorenzo
De i. a d., Daniel Úbeda, Antonio Jiménez, Gervasio Sánchez y de Sandra Balsells, en la inauguración. Marta Ceniceros

Arranca el Seminario de Fotografía de Albarracín con Divina Campo y Tony Lorenzo

El becado Oskar Alvarado inaugura su exposición ‘Where Fireflies Unfold’
banner click 236 banner 236

Por Josep García

La XXIV Edición del Seminario de Fotografía y Periodismo de Albarracín arrancó este sábado con ciento sesenta asistentes, entre alumnos, ponentes, invitados y personal técnico, prueba irrefutable de ser el certamen fotográfico más importante y prestigioso de cuantos se realizan en Europa.

La primera jornada se abrió con la tradicional y cálida bienvenida por parte de Daniel Úbeda, alcalde de la ciudad; de Antonio Jiménez, director gerente y secretario de la Fundación Santa María en nombre de la institución; de Gervasio Sánchez y de Sandra Balsells, directores del certamen, quienes coincidieron en agradecer la presencia de los participantes, que va desde jóvenes fotógrafos que aún están estudiando, a profesionales con una dilatada experiencia o personas de otros ámbitos, interesadas en el mundo de la fotografía y del periodismo. Ambos despertaron expectativas acerca de la próxima edición, que será la XXV.

Tony Lorenzo

Tras la presentación y agradecimientos, se iniciaron las ponencias. La primera recayó en Tony Lorenzo (Motril, 1985), un veterano del seminario, presente desde 2006, dar la charla que giró entorno a sus próximos proyectos. Tony vive actualmente en Oxford (Reino Unido), y como no habla apenas inglés, decidió usar la fotografía como lenguaje universal. Recientemente ha ganado la Beca Nuevos Talentos 2025 de los Encuentros Fotográficos de Gijón.

Para finalizar la mañana, nada mejor que una mesa redonda con la presencia de los alumnos becados en la pasada edición: Ángel García Martos, Natalia Georgieva, Lestonnac Ibáñez, Toni Privat, Rosa Ripoll, Antonio Ros y Oskar Alvarado.

A continuación, la responsabilidad cayó en la veterana de 93 años Divina Campo (Lleida, 1931), considerada la primera fotógrafa de Huesca.

Ejerció como profesional entre 1954 y 1958; cuatro años que le bastaron para retratar las primeras alegrías mundanas de una España aún instalada en el blanco y negro de la posguerra, cuando las cámaras todavía eran un objeto atípico en los hogares. era requerida para todo tipo de celebraciones familiares.

Su afición había empezado una década antes cuando confesó “haber dejado los libros en segundo de Bachillerato, ya que era muy mala estudiante”, empezando a ayudar a su padre en el laboratorio fotográfico familiar, en la vivienda familiar del Coso Alto. Así se fue trazando “la vida que quería hacer” y acabó colándose “hasta en la cocina de las casas”.

Ser mujer en una época de predominio masculino en la profesión, le abrió puertas insospechadas. “Me llamaban las chicas para que les hiciera fotografías en sus casas, y allí mismo, conmigo delante y entre risas, se cambiaban de ropa: que si ahora de jotera, que si ahora con mantilla y peineta... Era como si yo fuera una amiga más. También iba mucho a las casas a hacer fotos de niños, en distintas escenas”, relata.

Después de esos años fotografiando muy intensamente, Divina dejó la fotografía profesional cuando se casó, aunque nunca se apartó de la cámara, pues siguió tirando instantáneas, a sus hijos y a amistades, conservando como oro en paño sus negativos hasta que los cedió a la Diputación Provincial de Huesca, en 2018.

Un fondo de más de 17.000 imágenes, dónde se muestra el paisaje más humano y real de la sociedad de mediados del siglo XX.
 

Gervasio Sánchez, Divina Campos (c.) y Sandra Balsells. Marta Ceniceros

Las becas y las proyecciones

Por la tarde, la frenética actividad no se detuvo. Los alumnos pudieron mostrar sus trabajos a los diferentes profesores. Cabe recordar que los trabajos de los participantes optan a diferentes becas, un aliciente más para incentivar su labor.

Este año se entregará la II Beca de fotografía Fujifilm que tendrá una dotación económica de 4.000 euros más IVA. Un jurado formado por los responsables del seminario, una selección de ponentes y una persona en representación de Fujifilm Spain premiarán el mejor trabajo presentado y seleccionado en los visionados de porfolios durante la celebración del presente seminario.

La persona ganadora puede tener cualquier nacionalidad, pero deberá obligatoriamente, ser residente habitual en España. Recibirá el premio económico en concepto de cesión de derechos de autor, además del montaje de una exposición de su trabajo supervisado por la dirección del curso.

Otros 4.000 euros más IVA servirán para producir dicha exposición que se inaugurará en el XXV Seminario de Fotografía y Periodismo que tendrá lugar entre el 17 y el 20 de octubre de 2026 en Albarracín. Posteriormente, la exposición itinerará por diferentes ciudades españolas y será devuelta a la persona becada al finalizar la itinerancia.

La II beca internacional creada por la escuela BECA Center of Visual Storytelling dirigida por Dimitri Stefanov y Velina Stefanova en Sofía (Bulgaria), y valorada en 6.000 euros, se otorgará a un fotógrafo o fotógrafa emergente, seleccionado durante el visionado de porfolios del seminario. El ganador o ganadora deberá realizar un nuevo proyecto fotográfico que será comisariado por los responsables de la escuela búlgara durante 8 meses. Las fotografías seleccionadas serán expuestas en la ciudad de Sofía.

Por su parte, la Asociación Profesional de Fotoperiodistas de Aragón ha concedido una beca a Paula Andreu por su trabajo Women As Battle Field que documenta el papel de las mujeres en el conflicto armado colombiano y su rol en el acuerdo de paz, dicha beca supone la gratuidad de la inscripción, transporte y estancia en régimen de media pensión en el presente seminario.

Y por último se entregarán las prestigiosas Becas Albarracín 2025. Dicho reconocimiento otorga la invitación a la edición del siguiente año y la oportunidad de presentar un nuevo proyecto fotográfico en pantalla grande ante todo el público.

El equipo técnico y su profesorado, seleccionará los cinco mejores trabajos de los alumnos participantes en cualquiera de los talleres de visionado, becándoles la propia Fundación con la gratuidad de la inscripción completa para la siguiente edición del seminario, además de la exhibición de una proyección audiovisual de su trabajo en dicho seminario.

Al finalizar los talleres tuvo lugar la inauguración en el formidable espacio de Torre Blanca de la exposición Where Fireflies Unfold, de Oskar Alvarado, ganador de la I Beca de Fotografía Fuji el pasado año. Dicha exposición habla sobre el día a día de Deleitosa, su pueblo, situado en la provincia de Cáceres, en la región de Extremadura.

Por la noche, la Iglesia-Auditorio de Santa María fue el escenario donde se proyectaron los trabajos de los alumnos becados el año pasado. A continuación, las imágenes de los ponentes matinales (Judith Prat, Tony Lorenzo y Divina Campo).

Una mirada atrás

Todo surgió con la propuesta por parte de Antonio Jiménez, director gerente y secretario de la Fundación Santa María, al fotoperiodista Gervasio Sánchez, conocido por aquel entonces, pero poco, comparado a día de hoy… Éste en un principio la rechazó, pero cambió de opinión tras visitar con la familia la ciudad de Albarracín y descubrir el potencial que emanaba de los trabajadores de la fundación y el encanto del municipio.

La primera edición, contaba ya con magníficos profesionales entre sus ponentes, estuvieron Enrique Meneses, Ricard Masats, Juan Manuel Castro Prieto y Sandra Balsells, con quien Sánchez coincidió en las guerras balcánicas y a quien pidió colaboración para preparar la siguiente edición. Esa cooperación se mantiene año tras año, convirtiéndose en el tercer elemento imprescindible para alcanzar la hegemonía del certamen.

Cabe destacar que, además de ser una de las fotoperiodistas más cualificadas de Europa, es profesora de la Facultad de Comunicación y Relaciones Internacionales Blanquerna en la reputada Universidad Ramon Llull.

Con el tesón y la disciplina de estos tres pilares, Sánchez, Balsells y los trabajadores de la Fundación, pronto lograron que dicho seminario fuese y sea el más ilustre y bien organizado de cuantos se celebran en Europa; porque siguiendo el ejemplo, muchos nacieron pero ninguno alcanzó su sombra.

Desde luego, no debemos olvidar la fidelidad de los alumnos que acuden cada año y como es el caso de Román Navarro y Enric Centeno, presentes en todas las citas desde 2001.