El IES de Albarracín reescribe la película de los Amantes y Azagra deja de ser el malo

Isabel de Segura se casó obligada con Pedro de Azagra, señor de Albarracín, el malo de una película que ahora han reescrito los alumnos del Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) Lobetano de Albarracín, dándole el protagonismo que el denominado Amante olvidado, debió tener. Los chavales han celebrado el 25 aniversario del centro educativo con un proyecto teatral en el que se han sumergido en la época medieval.

El entorno de la ciudad se presta a esa ambientación del medievo y, por eso, ha sido el área de Geografía e Historia la que más ha tirado del carro. Sin embargo, los diferentes departamentos han colaborado y aportado los conocimientos para llenar de monjes, libros de canto o vidrieras las diferentes escenas. Todo el personal se ha implicado, incluso el personal administrativo y de consejería, que se ha puesto el dedal para ayudar a confeccionar los trajes de los alumnos que no tenían atuendo del siglo XIII. Las familias también han estado muy implicadas, al igual que el Ayuntamiento de Albarracín, la Fundación Santa María e incluso empresas particulares, puesto que el Grupo Gargallo cedió para la representación parte del mobiliario antiguo del Convento de las Monjas que van a reconvertir en hotel.

"No queríamos hacer un acto típico de conmemoración de los 25 años del IES Lobetano, sino sacar las clases del aula e implicar a las familias en el proyecto", destaca la jefa de estudios del centro, Silvia Martín.

Se trata de un centro pequeño, con 80 alumnos, y este proyecto educativo, que se ha gestado durante todo el curso escolar, los ha involucrado a todos para representar el momento en el que la familia Segura y la de Azagra sellan el compromiso matrimonial de sus hijos, Isabel y Pedro.

"En la historia de los Amantes de Teruel el señor de Albarracín apenas aparece, por eso hemos llamado a la obra El Amante olvidado", dice Silvia Martín, quien apunta que con esta actividad buscaban precisamente reivindicar la figura y la historia de Pedro de Azagra, señor de Albarracín.

El producto final fue la representación, a la que se invitó tanto a las familias como a los representantes institucionales de la zona, y se desarrolló con gran realismo e incluso con la presencia de caballos, que fueron aportados por dos alumnos del centro. La pareja se trasladó desde el propio instituto, que está ubicado en el barrio del Arrabal, hasta el centro de Albarracín. Allí el señor de Azagra presentó a la familia Segura a los diferentes gremios que trabajan en la ciudad. Desde el área de matemáticas trabajaron el sistema de pesos y el monedaje que luego aparecieron en la escena. A su vez, se mostró cómo se fabrica el típico yeso rojo de Albarracín o los detalles de los frisos.

Además, en el desfile de gremios se ofrecieron datos históricos y constructivos sobre el castillo, las murallas y la catedral, que sirvió de escenario para la firma del compromiso de boda enmarcado por coloridas vidrieras construidas desde el departamento de Tecnología y Plástica. En el escenario religioso se hizo hincapié en los libros que se utilizaban y los monjes, cuyo personaje se trabajó en el departamento de Religión, tuvieron allí un papel protagonista. Además, desde las áreas de Inglés y Francés se realizó la traducción de un folleto explicativo con la historia de El Amante olvidado.

La última parte de la representación tuvo lugar en la plaza de Albarracín y ni siquiera la lluvia quiso perdérsela. El público concentrado fue testigo del anuncio del compromiso entre la hija de los Segura y el señor de Albarracín.

Los diferentes actos contaron con música medieval en directo interpretada por el propio alumnado y trabajada previamente en las clases de Música. Y es que aunque la representación fue el broche final, detrás de cada una de las escenas había mucho trabajo en el interior del aula para que el proyecto multidisciplinar fuera un éxito y sirviera a su vez para afianzar los conocimientos del currículo educativo.

"Se ha volcado todo el centro, era un proyecto muy ambicioso y todos nos hemos implicado al máximo", recalca la jefa de estudios, quien pone el acento en la forma de trabajar del IES Lobetano a través de proyectos educativos siempre que resulta posible. Detalla que el hecho de contar con un reducido número de alumnos y unas familias tan implicadas propicia que se lleve a cabo otro tipo de enseñanza. Esa comunidad educativa activa cuenta a su vez con la implicación máxima del profesorado, aunque uno de los inconvenientes es su continua renovación al no ser un centro muy demandado por los docentes.

Los chavales estaban encantados con cómo se desarrolló la actividad que tuvo lugar el viernes 30 de mayo por la tarde, y ahora es momento, según indicaron desde el equipo directivo, de hacer balance y decidir si se repite en años posteriores.

A la representación asistió a su vez el director provincial de Educación, José Luis Castán, que está muy vinculado al IES Lobetano. El centro fue además reconocido el pasado mes de abril por el Servicio Provincial de Educación, que les concedió un premio por sus buenas prácticas educativas.