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Joaquín Tornero gana la Beca DKV Seguros 2021 del Seminario de Fotografía de Albarracín Joaquín Tornero gana la Beca DKV Seguros 2021 del Seminario de Fotografía de Albarracín
Gervasio Sánchez y Sandra Balsells, sentados en el centro, junto al resto del jurado del seminario, Antonio Jiménez de la Fundación Santa María y los ganadores. J. G.

Joaquín Tornero gana la Beca DKV Seguros 2021 del Seminario de Fotografía de Albarracín

La vigésima edición del Seminario de Fotografía y Periodismo se clausuró el martes
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Con las despedidas, los buenos augurios, los abrazos y la promesa de un feliz reencuentro previsto para el 22 de octubre de 2022, el martes finalizó la vigésima edición del Seminario de Fotografía y Periodismo de Albarracín, la del regreso tras el paréntesis vital de la pandemia, con todas las medidas de seguridad y protocolos que obligaron a modificar algunos espacios y mecánicas de funcionamiento, pero que retornó a la localidad turolense con el mismo músculo de siempre, agotando cupos de inscripción, con la sólida dirección de Gervasio Sánchez y Sandra Balsells y un nutrido grupo de ponentes y expositores que, dos décadas después de la primera edición del congreso, han llevado a convertirlo en uno de los encuentros nacionales más prestigiosos de su ramo.

Con el deseo de que la pandemia esté erradicada para dentro de doce meses y la XXI edición del Seminario se pueda realizar como antaño, con el 100% del aforo y pasando de los 140 inscritos de este año, al doble, llegó la jornada clave, en la que se desgranan las últimas ponencias y se entregan los premios y las becas entre los asistentes. En esta ocasión fue Joaquín Tornero Núñez el ganador de la Beca de fotografía DKV, dotada con 10.000 euros, por su trabajo en el barrio madrileño de La Cañada Real. Ese dinero servirá para que durante el próximo año Tornero produzca un nuevo trabajo fotográfico que será expuesto el año que viene en Albarracín, en el contexto del próximo Seminario de Fotografía y Periodismo.

La mañana de clausura fue intensa, en parte por la emoción de la despedida de numerosos fotógrafos que, en buena medida, son ya viejos conocidos gracias a la cita de Albarracín, sino también porque los encargados de impartir las últimas ponencias fueron José Luis Amores y Jesús Micó.

Ambos coincidieron en analizar las tendencias y formas de expresión de las últimas generaciones de fotógrafos profesionales, los paralelismos entre ellas y las diferencias con respecto a la fotografía clásica.

El primero, presente en el seminario desde 2015, codirige con Agustín Pérez de Guzmán Ballester el Centro Internacional de Fotografía y Cine (EFTI) de Madrid, una de las escuelas audiovisuales más prestigiosas de nuestro país, desde su fundación en el año 1987.

Amores realizó un interesante análisis a las diferentes formas de fotografiar, basándose en las últimas promociones de alumnos que han pasado por su escuela.

Por su parte Jesús Micó, habló a los casi 150 asistentes acerca de los principales parámetros de la fotografía española de autor tras el último cambio de siglo. Presente desde que se entrega la Beca Kursala como parte de los premios del seminario, Jesús Micó es licenciado en Medicina y Doctor en Bellas Artes (especialidad de fotografía), nacido en Cádiz en 1962 y residente en Barcelona, donde se dedica a la creación, gestión, investigación y docencia de la fotografía. Combina la enseñanza de esta disciplina con su obra personal y el comisariado de exposiciones de otros autores, especialmente aquellos noveles que acaban de aterrizar en la disciplina artística.

Como director de la Kursala, la sala de fotografía de la Universidad de Cádiz (UCA), fue quien seleccionó y entregó la beca a José Manuel Soto. Esta conlleva a realizar una exposición individual en la sala Kursala de la Universidad de Cádiz y la publicación de un fotolibro (que no catálogo) paralelo. El fotolibro es de libre creación autoral, pero debe versar sobre el mismo proyecto que la exposición. Las condiciones de ayuda para ambas actividades serán exactamente las mismas que se han concedido a todas las personas que han participado en la programación de la citada sala de la Universidad de Cádiz.

Carolina Rojo, representante de DKV Seguros, con el becado de este año, Joaquín Tornero Núñez. Josep Garcia

10.000 euros de premio

Tras las deliberaciones durante la tarde noche del lunes por parte del jurado, formado por los responsables del seminario y una selección de ponentes, se falló que Joaquín Tornero Núñez obtuviera la Beca de fotografía DKV Seguros dotada en 10.000 euros por su trabajo en el barrio madrileño de La Cañada Real.

A su vez, Beatriz Rivas Meco obtuvo la Beca EFTI pudiendo realizar gratuitamente el curso de Fotoperiodismo y Reportaje en el Centro Internacional de Fotografía y Cine (EFTI), valorado en 2.280 euros.

Dicho curso durará seis meses entre enero y junio de 2022 (fechas probables). Tres meses son presenciales en Madrid y en los otros tres desarrollará un proyecto que contará con un seguimiento permanente de los coordinadores del curso con reuniones cada tres semanas.

Y por último se entregaron las Becas Albarracín 2021 a los siguientes participantes: Flor Adela, Baltasar López; Brais Lorenzo y Santiago Donaire.

A todos ellos les espera un intenso trabajo, que tienen que desarrollar en los próximos meses, supervisados por Sandra Balsells. Dichas becas otorgan la invitación a la edición del siguiente año y la oportunidad de presentar un proyecto fotográfico, que se proyectará en pantalla grande ante todo el público que asista a la próxima edición del Seminario de Fotografía y Periodismo de Albarracín.

Las conclusiones por parte de Antonio Jiménez, director-gerente de la Fundación Santa María de Albarracín, y de Sandra Balsells y de Gervasio Sánchez, organizadores de la veterana cita, pusieron punto y final a cuatro días de frenética actividad; dónde han primado los reencuentros tras el aplazamiento del pasado año, las enseñanzas, la pasión por una misma afición, las medidas sanitarias, las reuniones nocturnas improvisadas al resguardo de las mascarillas y las murallas. y las fotografías, sobre todo las fotografías. La cita mantiene el músculo, la ilusión y el poder de convocatoria de siempre, porque al final y al cabo veinte años no es nada.

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