Dos de los descendidos estarán en un grupo dos más nutrido de turolenses

La Federación Aragonesa de Fútbol (RFAF) anunció este pasado jueves a través de sus redes sociales la división de los dos grupos que componen la Regional Preferente Aragonesa con un reparto de los equipos algo más equilibrado en comparación con la distribución del año pasado y con un grupo dos más nutrido de equipos turolenses, pese al descenso del Alcorisa y el Sportin Alcañiz, al pasar de los cinco equipos que militaban en dicho grupo a los seis equipos que pasarán a competir en dicho grupo el próximo curso: Alcañiz, Valderrobres, Calamocha B, Cella, CD Teruel B y Atlético Teruel.

El año pasado esta distribución trajo cola y cierto descontento, de hecho muchos equipos llegaron a proponerle alternativas a la RFAF ante el encuadre tan desigual de los grupos. En aquel entonces los tres equipos aragoneses descendidos de la Tercera RFEF fueron a parar al grupo dos, lo que generó una gran diferencia entre estos y el resto de los mortales. De hecho, esto se ha podido apreciar a lo largo de la temporada con el Cariñena y el Illueca dominando todos los escenarios.

En esta ocasión, la cosa ha variado y los recién descendidos de la Tercera RFEF, que habitualmente se presuponen más fuertes, se han repartido de manera que el Fraga militará en el grupo uno, mientras que el Brea y el Fuentes lo harán en el grupo dos. Así, el grupo dos sigue contando con más recién descendidos de una categoría superior, pero esto se ha visto compensado con el número de recién ascendidos de Primera Regional, que se presuponen algo más flojos, ya que el grupo uno contará con tres recién ascendidos de la categoría inferior, mientras que el grupo dos contará con cinco de estos equipos. Asimismo, también se han dado ciertas variaciones entre algunos equipos ya establecidos en la categoría atendiendo a criterios geográficos para reducir las distancias en los desplazamientos, lo que, a su vez contribuye también a nivelar los grupos, ya que algunos rivales poderosos del grupo dos han migrado al grupo uno y viceversa. Es el caso de equipos como el Magallón, el Mallén, el Borja o el Pradillano que se mudan del grupo dos al uno, o el caso de equipos como el Quinto o el Alfindén que pasan ahora del grupo uno al grupo dos.

De esta manera, el grupo uno estará compuesto por: Sabiñánigo, Sadabense, Peña Ferranca, Santa Anastasia, Siétamo, Gurrea, Mallén, Gallur, Alcolea, Magallón, Borja, Pradillano, Ranillas, San Agustín, San Lorenzo, Ontiñena, Altorrincón y Fraga; mientras que el grupo dos, el turolense, estará compuesto por: Bra, La Muela, San José, Valdefierro, Montecarlo, Alfindén, Calatayud, At. Cariñena, Morata, Fuentes, Quinto, Herrera, Alcañiz, Valderrobres, Calamocha B, Cella, CD Teruel B y Atlético Teruel.

Con los dos grupos ya establecidos, según indica la propia Federación Aragonesa de Fútbol, está previsto que la liga arranque el primer fin de semana de septiembre, concretamente el domingo 7 de dicho mes. A partir de ese momento todos los equipos alzarán de nuevo sus espadas en busca de conseguir sus metas en el campeonato. En el caso turolense, el Alcañiz buscará acechar a los líderes como en los últimos años, mientras que los demás tratarán de sujetar la permanencia y quedar lo más arriba posible.

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