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El alcañizano Alonso Ibáñez le da a Aragón el triunfo en la final de la Fase Plata frente a Galicia El alcañizano Alonso Ibáñez le da a Aragón el triunfo en la final de la Fase Plata frente a Galicia
Alonso celebra el tanto marcado con Aragón para decidir la final ante Galicia

El alcañizano Alonso Ibáñez le da a Aragón el triunfo en la final de la Fase Plata frente a Galicia

Un tanto del turolense casi a la hora de un complicado partido decide el título nacional

Aragón vuelve a lo más alto. El combinado sub-16 de la selección cuatribarrada se proclamó campeón de España de la Fase Plata de selecciones territoriales tras imponerse por 0-1 a Galicia en una final disputada, intensa y de gran nivel técnico. El tanto decisivo llevó la firma del alcañizano Alonso Ibáñez, que culminó una excelente jugada al espacio en el minuto 55, haciendo justicia a la ambición y el buen hacer del bloque dirigido por Espeleta.

Desde el pitido inicial, ambos conjuntos mostraron sus credenciales, con una propuesta valiente, un trato exquisito del balón y una presión bien medida.Galicia llevó peligro en acciones aisladas, pero Aragón, firme y ordenada, se mantuvo sólida. La primera gran intervención llegó por parte del meta aragonés Héctor Gálvez, que en el minuto 31 evitó el tanto rival con una parada salvadora en el área pequeña. Fue un punto de inflexión. A partir de ese momento, Aragón se adueñó del ritmo del partido. Con Álvaro Fernández creando peligro constante por la banda derecha y un medio campo dominador, los de Espeleta comenzaron a generar ocasiones claras antes del descanso.

El bloque no se arrugó y mantuvo la intensidad tras el paso por vestuarios. La recompensa llegaría en el minuto 55; un pase filtrado preciso de Álvaro a Alonso, que leyó el desmarque a la perfección, sirvió para que el del Alcañiz se plantara en el área para definir con sangre fría y adelantar a los suyos. Viene siendo clave el turolense para el combinado cuatribarrado, y su gol, que valía un título, fue celebrado con la garra y la emoción propias de un grupo que ha crecido y madurado durante toda la competición.

En busca del segundo

Lejos de conformarse, Aragón buscó el segundo con varias llegadas peligrosas, mientras que Galicia trató de reaccionar, sin éxito, ante una defensa que se mostró infranqueable. Con los cambios bien gestionados desde el banquillo, el conjunto aragonés supo conservar el resultado y afrontar los últimos minutos con oficio, templanza y espíritu de equipo. Son valores que los futbolistas de esta generación llevan tatuados a fuego, y que también sobresalen en el rendimiento de Ibáñez, que vuelve a Alcañiz con un título y otra gran experiencia con el combinado aragonés.

El pitido final desató la alegría entre los jugadores y el cuerpo técnico. Este triunfo no es solo un título: es el reflejo de un grupo unido, disciplinado y lleno de talento, que ha sabido representar con orgullo el fútbol aragonés. Vuelta a casa, y atención a la evolución de Alonso, que cuenta los días para incorporarse al juvenil de Liga Nacional que maneja también una buena camada de peloteros que han logrado la permanencia un año más.
 

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