El mercado de verano causa impactos desiguales en los turolenses de Tercera

El mercado de fichajes de este verano ya empieza a causar efectos ostensibles y desiguales en los equipos turolenses. Mientras unos celebran la llegada de jugadores que han contribuido al crecimiento deportivo del equipo, otros consiguen mantener su rendimiento de temporadas pasadas y otros añoran las figuras de algunos futbolistas que se marcharon. Los primeros son los calamochinos, que han pasado a pelear por cotas más altas; los segundos son los andorranos, que no han tenido el mismo arranque fulgurante que el año pasado, pero conservan el rendimiento sobre el verde; y los últimos son los utrillenses, pues les toca revivir sus peores momentos en la categoría en plena pugna por zafarse del descenso.

De los tres equipos, el Calamocha es el que más sonríe. Después de muchos años intentando construir un proyecto digno de play-offs, parece que este año han dado con la tecla. La entidad ha logrado gestar un grupo muy equilibrado con una gran solvencia defensiva, pero, sobre todo, con una gran capacidad goleadora, su principal debilidad años atrás, gracias a las incorporaciones. Tanto es así que de los 19 puntos que ostenta el club para coliderar la tabla, los nuevos fichajes han tenido un impacto directo en 18 puntos.

Celes, Edson So Delgado, Carrasco, Adrián Dos Santos e incluso los defensas Cirac y Crespo han sido claves, junto a otros jugadores ya calamochinos como Dani Torcal, para lograr los 14 goles a favor que han servido para sumar seis victorias, un empate y tan solo dos derrotas en las nueve jornadas disputadas hasta el momento. Además, con esos 14 goles el Calamocha figura como uno de los equipos más goleadores de la categoría. Este ranking lo encabeza el Huesca B con 16 dianas y justo por detrás de él aparecen empatados a 14 tantos el Calamocha y La Almunia. Así pues, los del Jiloca tienen motivos para estar contentos con la gestión realizada este verano.

Los andorranos, por su parte, no realizaron demasiados cambios este verano, de hecho, la plantilla de este año la confirmaron con 14 jugadores del curso pasado y ocho nuevas incorporaciones que están teniendo un impacto más moderado. En su caso, la mayor parte de las incorporaciones llegaron para la parte de atrás y del centro del campo, por lo que su impacto se observa más en la labor defensiva, pues el conjunto de Gil había logrado mantenerse invicto hasta esta última jornada, cuando cosecharon su primera derrota.

El único pero en su caso estaba en la zona de ataque, pues el club estuvo sin ver puerta durante las cuatro primeras jornadas. No obstante, una vez explotó su faceta goleadora también se pudo ver el impacto de los fichajes en este apartado. En este sentido, Taboada y Mishu mucho tuvieron que ver en la victoria en el derbi ante el Calamocha, y Adán Pérez logró sacar un empate en lo que parecía ir camino de la derrota ante el Cariñena. Así pues, con mucha base del curso pasado y las novedades el Andorra ha conseguido mantener un rendimiento aceptable. No es el inicio arrollador del año pasado, pero demuestra mayor estabilidad.

Por último, el CD Utrillas es el equipo al que peor le ha sentado el mercado. Nombres como el de Redolar, el de Tatín, el de Jorge López o el de Adrián Hernández se echan de menos en la entidad de La Vega, que vuelve a vivir sus peores momentos en la categoría al verse de nuevo con su continuidad en la Tercera RFEF en entredicho. Los fichajes que más han aportado por el momento son Christian Castro, Diego Argente y Pelegrín para atar con sus goles cuatro empates que contribuyen a los cinco puntos que ostenta el club en su casillero. Pero, por ahora, no han podido llevar al conjunto de Lerga a su primera victoria, que le daría oxígeno en el momento tan delicado en el que se encuentran.