Jesús Bernal: “Bernad es un portero con muchos reflejos y muy buen pie” 

“Estos meses estoy teniendo la oportunidad de ver el fútbol desde fuera, con perspectiva”. Está conociendo Jesús Bernal, centrocampista de Muniesa, pivote ahora en la plantilla del Sporting de Gijón, la cara más amarga del fútbol. O quizá, simplemente, una diferente, la de detrás del telón, la del trabajo oscuro fuera del terreno de juego en la que se ven, por lo demás, todos aquellos que “suman, me ayudan y me dan fuerza”, dentro y fuera de su equipo.

Bernal se lesionó en la rodilla este pasado curso con el equipo asturiano, y afronta este verano la recta final de su recuperación con ansias de volver al césped. Calcula que le queda un mes para volver al ritmo pleno de entrenamientos; ya calienta y toca balón con el grupo, pero no está aún para el ritmo intenso de estos días. Así que pocas vacaciones. Mucho gimnasio, fisio, fuerza, musculación... Y tiempo para, en efecto, tomar conciencia de lo que pasa alrededor. Una semana ha pasado el futbolista en su pueblo, "la casa es el refugio", resume. 

En esa perspectiva global que Bernal está tomando durante su parón degusta, paladea, los éxitos de sus equipos. “Guardo especial cariño al Tarazona. Y el Teruel es el equipo de mi tierra. Es muy, muy meritorio que estén los dos en Primera Federación. Hay que destacarlo”. Sabe el turolense lo que cuesta llegar a esa antesala del fútbol profesional. Más, si cabe, pisarlo como lo logró con un proyecto, el del Racing de Ferrol, que integró en categoría de bronce para dejarlo en Segunda División. Alli coincidió con el que será portero del Teruel esta próxima temporada.

Completamente preparado

“Jugó poco, pero en los entrenamientos estuvo siempre a disposición, al máximo nivel”, describe el centrocampista respecto de Emilio Bernad con el que, en efecto, compartió vestuario en el primero de los dos cursos que el club ferrolano ha logrado sostenerse en la categoría de plata del fútbol español. Allí tuvo competencia de altísimo nivel, en una campaña además brillante en la que los gallegos estuvieron rozando los puestos de ascenso a Primera. Allí estaban nombres aragoneses como Carlos Vicente o Delmás, junto a Bernal. Y piezas clave como Señé, Iker Losada o el arquero que cerró el paso de Bernad, Cantero. Titular, todos los partidos, todos los minutos.

No dejó espacio ni para Gazzaniga, el teórico suplente que compartió banquillo con Bernad. Pero detrás del incuestionado Cantero apretaron los dos reservas, y Bernal pudo observar condiciones más que suficientes para el portero castellonense, de quien afirma que tiene calidad de sobra para Primera RFEF. “Es un meta que tiene muchísimos reflejos y muy buen golpeo de balón, un pie fino” con toque preciso en largo que le va a venir perfecto al planteamiento de Vicente Parras en una categoría que exige destreza tanto en el manejo de la posesión larga como en la búsqueda del contragolpe rápido a la espalda de los rivales.

Los caminos de Bernal y Bernad se separaron ya la temporada pasada, con el de Muniesa en Gijón y el de Vall d’Uixó aguantando un año más; pudo debutar, de hecho, en la última jornada de liga, ya con el equipo ferrolano descendido a Primera Federación. Cambia Galicia por Teruel, en esa misma categoría, Emilio Bernad, a quien el club rojillo buscará arquero suplente que le dé relevo y sobre todo competencia diaria para afrontar con garantías el regreso al fútbol de bronce. La primera prueba se le verá esta próxima semana, el miércoles que viene, en el primer amistoso de pretemporada ante un rival de Primera, el Levante, en Campo Pinilla. Banco de pruebas perfecto para comprobar las buenas referencias que vienen desde Muniesa.