Fernando Valmaseda, presidente de la Red de Pueblos Gastronómicos de España: “La red no busca rentabilidad sino crear una marca España desde lo rural y lo gastronómico”

Fernando Valmaseda es el presidente de la Red de Pueblos Gastronómicos de España, a la que se acaba de sumar Mora de Rubielos. Se trata de una iniciativa nueva, que se presentó en el mes de abril, pero que lleva detrás más de dos años de arduo trabajo para establecer los requisitos que deben cumplir los municipios que la integran.

-¿Qué es la Red de Pueblos Gastronómicos de España?

-Es un proyecto que trata de vertebrar todo el territorio nacional, uniendo a aquellos municipios que, por su belleza y por su gastronomía, reúnen excelencia y calidad turística. Queremos potenciar el desarrollo rural, generar empleo y riqueza, pero sobre todo crear una marca país que nos represente a nivel nacional e internacional, para que el viajero descubra España a través de sus pueblos, sus tradiciones y su gastronomía.

-¿Cuántos pueblos forman parte actualmente de la red?

-En estos momentos hay 11 pueblos integrados formalmente. Hay otros 32 que ya han firmado la carta de adhesión y solo están a la espera de la firma del interventor, por lo que podemos considerarlos dentro. Además, hay 104 pueblos más que han solicitado la adhesión y que estamos auditando.

-¿Qué criterios deben cumplir los municipios para poder integrarse en la Red?

-Se realiza una auditoría de 100 puntos y deben cumplir al menos 70. Hemos sido muy estrictos con esto, hay dos bloques que pesan cada uno un 50%. Por un lado está el turístico y por otro el gastronómico. En el turístico analizamos patrimonio, cultura, tradiciones, fiestas, folclore, naturaleza, entre otras. En el gastronómico evaluamos productos locales, recetas ancestrales, productores, restaurantes, panaderías, iniciativas innovadoras... En resumen, buscamos excelencia y calidad. No es una cuestión de número de pueblos, sino de tener lo mejor de lo mejor.

-¿Qué aspectos de Mora de Rubielos destacaron para su incorporación?

-Mora es un lugar que conozco bien, he hablado de él muchas veces como periodista. Su patrimonio arquitectónico y cultural es impresionante. Ha cumplido todos los estándares de calidad en el bloque turístico, y en lo gastronómico ha demostrado una fuerte apuesta por la cocina local, la recuperación de recetas tradicionales y la promoción de productos del territorio. Ha superado la auditoría con nota.

-¿Qué beneficios concretos aportará a Mora formar parte de la Red?

-Promoción nacional e internacional, atracción de nuevos viajeros, generación de empleo y desarrollo económico. Además, Mora ya ha comenzado a recibir formación empresarial especializada, como la que impartimos hace unos días en la propia localidad. Tendrá acceso a 12 webinars anuales sobre turismo, comercialización, comunicación o tecnología, incluso sobre Inteligencia Artificial. Participará en diez presentaciones nacionales y tres internacionales como socio fundador, una distinción que tienen los quince primeros asociados, lo que le da voz y voto en el proyecto.

-¿Qué papel jugará la Red en el auge actual del turismo gastronómico?

-Jugará un papel básico. Queremos crear una marca España desde lo rural y lo gastronómico, que reúna a los pueblos más representativos de nuestra diversidad y calidad culinaria y turística. Esta red debe ser la puerta de entrada para conocer la España más auténtica.

-¿Qué otras localidades de Teruel podrían seguir los pasos de Mora?

-Tenemos sobre la mesa las candidaturas de Rubielos de Mora y Albarracín. Pero aún estamos valorando en profundidad. En algunos municipios hay aspectos del desarrollo gastronómico que no llegan al mínimo de 70 puntos. La gastronomía debe estar viva, activa, y tener propuestas de calidad para poder entrar.

-¿Qué mensaje lanzaría a otros municipios que estén considerando presentar su candidatura?

-Les diría que apuesten fuerte por su proyecto turístico y gastronómico. Que se lo crean, que estén orgullosos de lo que tienen. Si trabajan por poner en valor su tradición culinaria y su identidad, nosotros analizaremos con detalle cada caso. No se trata de pagar una cuota, sino de formar parte de un gran proyecto.

-¿Qué coste tiene para los pueblos formar parte de la Red?

-Hay una cuota anual única para todos los municipios, es muy ajustada, porque esto no va de recaudar, sino de crear un gran proyecto colectivo. Con ella se incluye formación constante, gamificación del municipio –creamos un juego personalizado para que los visitantes lo conozcan de forma lúdica–, promoción y comunicación a nivel nacional e internacional, acceso a webinars, presencia en eventos, y el estatus de socio fundador.

-¿Se está trabajando ya en la internacionalización del proyecto?

-Sí, y con mucho interés. La Asociación de Pueblos Mágicos de México ha solicitado un acuerdo para llevar nuestra red allí, especialmente de cara al Mundial del año que viene. También la Asociación de Aldeas Históricas de Portugal ha mostrado su interés en colaborar con nosotros. Esto va muy rápido y tiene una proyección internacional enorme.