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Jaime Fierro, realizador turolense: “Muchas personas no encajan y buscan su propio mundo; creo que es lo que yo hago con el cine” Jaime Fierro, realizador turolense: “Muchas personas no encajan y buscan su propio mundo; creo que es lo que yo hago con el cine”
Tras dos cortometrajes, Jaime Fierro proyecta sacar adelante tres más en 2024

Jaime Fierro, realizador turolense: “Muchas personas no encajan y buscan su propio mundo; creo que es lo que yo hago con el cine”

El director está preproduciendo ‘Noche de ritual’, el que quiere que sea su corto más ambicioso hasta ahora
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Tras Lejos de tu vista y The watcher of darkness, el realizador turolense Jaime Fierro sigue explorando el mundo del terror en Noche de ritual, el tercer contrometraje en el que ha empezado a trabajar. Ambientado en el mundo de la brujería vinculado a la localidad de Jabaloyas, el director busca financiación para la que quiere que sea su producción más ambiciosa hasta el  momento.

-¿En qué fase se encuentra el proyecto ‘Noche de Ritual’?

-Estamos todavía muy al principio. Tengo el guion pero estoy haciendo la preproducción; los diseños, pensando los planos, buscando equipo técnico y el elenco de actores para participar. Cuento ya con algunas personas interesadas, sobre todo estudiantes de Bellas Artes, pero me falta todavía equipo técnico en cuanto a luces o sonido. Y a partir de ahí me gustaría encontrar financiación para darle un empujón económico y que el cortometraje sea algo más ambicioso.

-¿Por qué repite en el género del terror?

-El tipo de historias donde quiero moverme tienen que ver con el terror, la fantasía tétrica, el thriller... En realidad no sé si se puede definir como terror, porque no busco el cine de susto, sino de situaciones lentas, pausadas, con una ambientación muy siniestra y con algo por descubrir. Noche de Ritual quiero que traslade esa sensación de oscuridad, con la noche, los rituales y las brujas, pero mi forma de verlo no es a través del miedo o de los sustos, sino algo más esotérico, fantásico y arcano. Ese es un poco mi leit motiv.

-Más allá de recrear esa ambientación, ¿qué historia quiere contar?

-La película cuenta la historia de una chica joven de Jabaloyas, harta de ver la vida como una presión, donde las normas sociales le dicen lo que tiene que hacer en todo momento. Así que decide escapar de esa cárcel e ir a un mundo en el que sí que cree, que es el de las brujas. Así que una noche de brujas, realiza un ritual en unas antiguas ruinas a través del que llama a entes antiguos para que la inicien. La historia no pretende tener una elaboración compleja o muy profunda psicológicamente, sino que sirva de reflejo de lo que sienten muchas personas, incluido yo mismo. Muchas personas no encajan demasiado en los estereotipos de la sociedad, porque creen en otro tipo de valores, y al final todo les impulsa a abrazar ese mundo que de veras aman. Creo que eso es lo que yo hago a través del cine.

-¿Ambienta la película en la actualidad?

-No, el presente de Luna, la protagonista, estaría en el siglo XVIII. Creo que es mucho más sugerente, aunque en realidad me gusta jugar con las ambientaciones y las épocas... las brujas incluso tendrán un aspecto más medieval, tomando elementos de las tradiciones nórdicas y vikingas. Permite comprender el mundo de la brujería como algo que puede existir y hace que la historia sea mucho más redonda.

-¿Por qué quiere vincular el proyecto a Jabaloyas?

-Creo que es un lugar muy interesante y que, en Teruel, es el que más relación tiene con la brujería, ligado a los aquelarres y toda esa tradición. Me gustaría que se estableciera algún tipo de relación, que me sirviera para seguir creciendo como cineasta y también para darle cierta visibilidad al pueblo y sus leyendas.

-¿También rodaría allí?

-El pueblo tiene buenas localizaciones. Ya lo he visitado varias veces y había muchas localizaciones que me encajaban. Y Jabaloyas tiene algunas zonas nuevas pero no es difícil seleccionar planos para que parezca un pueblo de otra época. En propio monte Jabalón, donde según las leyendas se reunían las brutas, es muy sugerente, y además haría que el pueblo fuera reconocible en el corto. También es verdad que una parte de la película, cuando aparecen las brujas en el ritual, se rodaría en un exterior no necesariamente en Jabaloyas, sino en otra localización que nos fuera más cómoda, con decorados y escenografía.

-Grabar en exteriores siempre complica las cosas...

-Así es. Pero a mi no me gustan demasiado los efectos especiales logrados a través de pantallas verdes, la verdad. Me gusta grabar en sitios reales con elementos físicos, y en este caso la idea es rodar prácticamente todo el cortometraje en exteriores.

-¿Cuál o cuáles prevé que serán las mayores dificultades de este proyecto?

-Lo más complejo es que, para que sea una película más ambiciosa, quiero que sea un proyecto colaborativo, donde yo no tenga que encargarme de casi todo como hasta ahora, y movilizar actores, extras del pueblo y técnicos significa una complicación importante de por sí.

-¿Qué presupuesto y plazos de rodaje maneja?

-Pues me gustaría grabarlo en Semana Santa y poder presentarlo en verano. En cuanto al presupuesto, me fijé un mínimo de 4.000 euros que está calculado bastante al alza, y en función de lo que obtengamos habrá quizá que modificar.

-¿Será su único proyecto en 2024?

-En realidad no. Este quiero que sea el más ambicioso, aunque este año quiero hacer otros dos cortos; Sueño inerte, sobre un fenomeno denominado parálisis del sueño, que yo experimenté personalmente, y otro sobre rituales y sacrificios, que quiero presentar al Festival de Micrometrajes de Terror de Sabadell.

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