Lola Temprado Serrano, 'influencer' del belenismo: “YouTube ha cambiado el mundo del belenismo, antes era cerrado, nadie compartía sus técnicas”

Lola Temprado Serrano es una de las grandes divulgadoras del belenismo a través de las redes sociales. Con cerca de 900.000 seguidores en YouTube, ha revolucionado la forma de entender y construir belenes y está considerada una de las principales Influencers belenistas.

-¿A qué se dedica exactamente dentro del mundo del belenismo?

-Hago árboles, escenografía y técnicas belenistas, y todo eso lo enseño en vídeo, muestro el paso a paso. Tengo dos canales en YouTube dedicados a diferentes técnicas, aunque donde más contenido belenista subo es en mi canal principal, Las cosas de la Lola. Este año he bajado el contenido, pero he seguido dando cursos, que son uno de mis puntos fuertes, por toda España.

-¿Además de enseñar vende productos de belenismo?

-Sí, vendemos bajo demanda. No tengo tienda física. A través de las redes sociales vendemos figuras, vegetación y elementos de escenografía, todo relacionado con belenes.

-¿Qué tipo de figuras son las más demandadas, hebreas, napolitanas, tradicionales?

-En nuestro caso se vende de todo por igual. Hay belenistas muy puristas que buscan figuras hebreas, por ser lo más fiel a la época de Jesucristo. Pero el belén popular también mezcla mucho: figuras hebreas con figuras costumbristas. La gente compra según le gusta la figura, no tanto por la etiqueta.

-¿Qué técnicas enseña en cursos como el que impartió en la Sierra de Albarracín?

-Son técnicas propias, una de mis especialidades es la espuma de poliuretano. Es un material que ha venido para quedarse porque no pesa, se trabaja rápido y el realismo que se consigue es impresionante. Está sustituyendo al corcho, al yeso o a la tela.

-¿Qué tiene de novedoso?

-He desarrollado una técnica propia para tallar piedra directamente con espuma sobre cartón, porexpán o cualquier superficie. Con la misma espuma hacemos suelos, paredes, arcos o sillares. En unos 15 minutos puedes tener una fachada hecha, cuando antes se tardaban 10 o 12 horas. Es una técnica que descubrí e inventé yo y está teniendo muchísimo éxito.

-¿Qué tipo de espuma utiliza?

-No es la industrial de dos componentes que se usa en fachadas. Es una espuma en bote que se aplica con pistola. Sale con una textura cremosa, como una mayonesa, y antes de que seque hay unos 15 minutos para trabajarla y darle forma.

-¿Enseña a hacer cosas con agua como cascadas o ríos?

-Sí, la mayoría de las cascadas que hago, tanto en cursos como por encargo, son con agua real, aunque también hago simuladas. En Albarracín hicimos una cascada espectacular y la gente quedó encantada.

-¿Quién suele contratarla para impartir estos cursos?

-Casi en un 99% son asociaciones belenistas, que con los cursos atraen gente. Se crean grupos con mucha ilusión, la gente aprende, aplica las técnicas y luego me manda fotos de sus belenes. Esa satisfacción no tiene precio.

-¿Qué perfil de alumnado asiste a sus cursos?

-De todo tipo. Desde personas que no han tocado nunca la espuma de poliuretano hasta belenistas muy veteranos. Como mis técnicas son propias, no las conoce nadie más. Y cada vez viene más gente joven, aunque la mayoría sigue siendo gente mayor. El belenismo es un antiestrés absoluto.

-Usted insiste mucho en el valor emocional del belén.

-Lo importante no es el valor económico ni la perfección, sino la fe y la ilusión que se pone. Crear algo con las manos libera energía y es muy gratificante. De la nada puedes sacar una maravilla. En nuestro belén de Requena, por ejemplo, tenemos una cascada que mueve 17.000 litros de agua por hora, hecha solo con cartón, espuma y arena.

-¿Hay relevo generacional?

-Sí, cada vez más. YouTube ha cambiado radicalmente el belenismo. Antes era un mundo muy cerrado. Los grandes artesanos no compartían sus técnicas. Yo empecé a enseñarlo todo, mis trucos y mi forma de trabajar, y eso rompió muchos esquemas.

-¿Cómo empezó su aventura en YouTube?

-Antes hacía paso a paso con fotografías en foros. Un día grabé un vídeo muy corto para ayudar a una persona de México y, en 18 horas, tenía 42.000 visitas. Ahí entendí que había una gran necesidad de aprender belenismo y abrí mi canal.

-¿Se considera usted una influencer del belén?

- Sí, se podría decir que sí. He conseguido que la gente deje de hacer cosas incoherentes en los belenes, como mezclar escalas sin sentido. Siempre busco realismo, coherencia y, sobre todo, economía. Nunca he querido que la gente gaste dinero innecesariamente. Siempre doy alternativas caseras y accesibles.