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María Zúñiga, geógrafa, profesora de la Universidad de Zaragoza y una de las autoras del Mapa 174: “Queríamos poner luz a  las desventajas demográficas con un mapa que lo reflejase” María Zúñiga, geógrafa, profesora de la Universidad de Zaragoza y una de las autoras del Mapa 174: “Queríamos poner luz a  las desventajas demográficas con un mapa que lo reflejase”
María Zúñiga, profesora de la Universidad de Zaragoza

María Zúñiga, geógrafa, profesora de la Universidad de Zaragoza y una de las autoras del Mapa 174: “Queríamos poner luz a las desventajas demográficas con un mapa que lo reflejase”

“Siempre se ha trabajado con el indicador de densidad, pero hay más matices que había que incorporar”
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La geógrafa María Zúñiga es profesora de la Universidad de Zaragoza, investigadora del grupo GEOT del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio. Ha sido una de las autoras del Mapa 174 de zonificación de los municipios españoles sujetos a desventajas demográficas, impulsado por la Red de Áreas Escasamente Pobladas del Sur de Europa (SSPA), que engloba a las organizaciones empresariales de Teruel, Cuenca y Soria, y que cuenta con el respaldo de sus tres diputaciones provinciales.

-¿Qué es el GEOT?

-El GEOT es el Grupo de Estudios de Ordenación del Territorio, uno de los grupos de investigación de la Universidad de Zaragoza, que tiene treinta años de recorrido. Nuestro foco sobre todo está en trabajar aquellos conceptos que pueden apoyar la ordenación de un espacio, ya sea el estudio de la población, de la salud, de la movilidad, de la situación de vulneración social, y también la manera de reflejarlo a través de cartografía temática, que es una de las vocaciones que tenemos.

-¿Cómo ha surgido la elaboración del Mapa 174 para zonificar los municipios españoles en función de su verdadera situación demográfica?

-Es un reto que nos plantearon desde la red SSPA, es un guante que nos lanzaron y que recogimos, en el que  básicamente se quería tener como brújula ese artículo 174 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea que decía que había que intentar que no hubiera espacios con situaciones de desventaja demográfica grave y permanente. Queríamos poner luz y datos a las desventajas demográficas con un mapa que lo reflejase.

-¿Se había hecho antes algo parecido?

-En despoblación hay distintos trabajos y líneas de abordarlo. Sí que había indicadores previos, pero también es verdad que casi siempre se trabajaba con el indicador de densidad de población, que es importante, pero hay muchos más matices que considerábamos que había que incorporar y que hemos intentado hacerlo.

-¿Qué aportan esos otros indicadores?

-Ofrecen una imagen más precisa. Al final la densidad de población es un indicador débil que se puede concretar trabajando por ejemplo sobre superficie construida, pero que también puedes completarlo con otras dimensiones de la realidad territorial a la que pertenece el reto demográfico: cómo ha evolucionado la población, no solo cuánta gente hay ahora sino cuánta ha habido y cuál ha sido su evolución, cómo es la población que vive en un espacio, si está más envejecida en lo que sería una consecuencia de la despoblación, o si hay población joven, y luego está toda la parte del medio físico, porque no es lo mismo vivir en altitudes muy elevadas que condicionan a determinados niveles el funcionamiento de un municipio, y también la propia pendiente, que condicionan infraesfructuras, agricultura y su propio funcionamiento. Mezclando esos seis indicadores en los tres componentes de distribución, estructura y medio físico, es como hemos construido este indicador.

-El mapa es de toda España, ¿sería extrapolable al conjunto de Europa?

-Efectivamente, de hecho la idea original era hacerlo en las tres provincias foco que tenemos, que son Soria, Cuenca y Teruel, pero nos pareció que era importante hacer esa visión más global con indicadores que son sencillos, públicos y de fácil actualización para poderlo aplicar también a escala europea.

-¿Se está entendiendo el problema de la despoblación, porque se habla mucho de ella, pero hay mucho ruido político y mediático?

-Hay determinadas palabras que de tanto oírlas al final se nos gastan. Esto nos pasa con cambio climático y hasta con la palabra guerra. En este caso corríamos también el riesgo de que reto demográfico y despoblación se gastara de usarse y que no se llegara a afinar lo suficiente. Creemos que esta propuesta de zonificación aporta esos matices y esa medición de la situación de despoblación que sí que permite que no sea café para todos a la hora de hacer políticas. Si hay 130 medidas, pues habría que ajustar las de más intensidad a los municipios que estén en situación que nosotros hemos definido como demográficamente muy grave. Ese ajuste más fino sí que creemos que se puede hacer.

-El criterio que aplica el Gobierno de los cinco mil habitantes no parece correcto.

-Hay que matizar, poder utilizar los datos públicos de la manera más eficiente posible sería una solución acertada.

-¿Qué recorrido tendría que tener este mapa ahora que es público?

-Nuestra ilusión es que tenga mucho recorrido. Tiene distintas vertientes, tanto a nivel social, para visualizar realmente lo que es la despoblación en España, como a nivel político para que sea un instrumento de medición de cómo está ahora y si aplico esta medida dentro de cinco años cómo estará. Al final es poder ver cómo ha evolucionado. También es verdad que la despoblación es un fenómeno estructural y hay que tener cuidado, porque no hay nada que sea rápido en este tipo de procesos. Sí convendría dar el tiempo suficiente y ver si realmente han surtido efecto las medidas tomadas o no.

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