Síguenos
Más que una experiencia religiosa Más que una experiencia religiosa

Más que una experiencia religiosa

José Baldó

Javier Calvo y Javier Ambrossi, conocidos popularmente como Los Javis, son uno de los tándems creativos más destacados del audiovisual español reciente. Pareja sentimental además de artística, son los responsables de la comedia musical La llamada y de importantes éxitos televisivos como Paquita Salas o Veneno. Por si fuera poco, ambos se han convertido en estrellas de la pequeña pantalla gracias a sus participaciones en talent shows como Operación triunfo y Mask Singer.

El estreno de su nueva serie en Movistar+, La Mesías, supone la consagración de Los Javis, como autores con un universo propio. Sin duda, estamos ante la obra más ambiciosa y compleja del dúo; una historia oscura y perturbadora que aborda temas como la religión, el desarraigo familiar y los traumas de la infancia.

Reconozco ante ustedes que me acerqué a La Mesías con prudencia. Siento poco más que simpatía por Paquita Salas y, desgraciadamente, no logré conectar con la joie de vivre de la celebradísima La llamada. Es más, tiempo después y por recomendación de un buen amigo, descubrí el film uruguayo Miss Tacuarembó (2010) con muchos puntos en común con la ópera prima de Calvo y Ambrossi pero que, a mi juicio, resulta más acertado en su gozosa celebración del musical más desatado, festivo y kitsch.

"Como una loncha de queso en un sándwich preso"

Una primera estrofa que es toda una declaración de intenciones. Amén fue el himno religioso con el que se dieron a conocer en 2014 las Flos Mariae, una banda de pop católico compuesta por siete hermanas, las Bellido Durán, que consiguieron hacerse virales entre los internautas españoles. Letras absurdas y coreografías imposibles son las señas de identidad de una formación nacida con el propósito de propagar la fe y alimentar el espíritu de los cristianos.

El nuevo proyecto de los responsables de Veneno toma como punto de partida la aventura personal del clan Bellido Durán, aquí convertidas en las Puig Baró y su grupo Stella Maris.

Con un arco narrativo que abarca desde la década de los 80 hasta 2013, La Mesías nos presenta a Enric e Irene (Roger Casamajor y Macarena García), dos hermanos perseguidos por los monstruos de la infancia y los desmanes de una madre manipuladora que aseguraba hablar con Dios. El encuentro de ambos en el presente con el fenómeno viral de Stella Maris destapa los recuerdos y el sentimiento de culpa por las hermanas que dejaron atrás bajo el temible yugo mesiánico de la matriarca. El conjunto musical definido ya en el primer capítulo como “una mezcla entre las Spice Girls, Wendy Sulca, Marilyn Manson y Santa Justa Clan” activa el resorte que conectará a los protagonistas con su propia niñez.

Uno de los platos fuertes de la serie es la gran interpretación de su reparto: desde la Santísima Trinidad formada por Ana Rujas, Lola Dueñas y Carmen Machi, encargadas de poner voz y rostro a las diferentes etapas de la madre del clan, hasta las incorporaciones de Albert Plá en el rol paterno o la extriunfita Amaia Romero como miembro destacado de las Stella Maris.

Con esta nueva apuesta, Los Javis hacen suyo un material extremadamente sensible, huyen del biopic bizarro y logran expandir los límites del drama convencional para crear un ejercicio de puro terror psicológico.

No hay duda de que estamos ante algo realmente grande. Mucho más que “una experiencia religiosa”, La Mesías ha resultado ser la mejor serie española del año.