Dos catedráticos del Instituto, ejecutados y olvidados (II)

Germán Araujo Mayorga, el otro catedrático ejecutado, nació en Madrid en 1905 dentro de una familia  protestante de la iglesia evangélica española, de las más notorias de principios de siglo. Según uno de sus familiares, Jaime Ramírez Araujo, las reducidas comunidades protestantes en España recibieron influencias educativas y culturales muy diferentes a la mayoritaria población católica española, derivadas de las misiones religiosas europeas (principalmente inglesas y francesas) que a finales del XIX contribuyeron al renacer del protestantismo en España (erradicado por completo en el siglo XVI).

Los pequeños núcleos evangélicos  se relacionaron con la población española no solo a nivel religioso desde sus humildes iglesias, sino fundamentalmente a través de sus escuelas desde donde se impartía no solo la instrucción más básica, sino una idea abierta, igualitaria, plural y democrática de la convivencia, que entroncaba con las nuevas propuestas educativas de la Institución Libre de Enseñanza y otras corrientes que desde finales del XIX que contribuyeron a una apertura en el panorama educativo español. Además, los evangélicos españoles formados en espíritu de tolerancia simpatizaron enseguida con los partidos de izquierda y republicanos con los que compartían sus ideales de cambio y regeneración.

Araujo concluyó los estudios de Licenciado en Ciencias, sección Físicas, en el curso 1928-29 con 23 años obteniendo el premio extraordinario del Ayuntamiento de Madrid. En esta ciudad es donde dará sus primeros pasos en la docencia en el Instituto-Escuela (sección del Retiro) a lo largo de tres cursos hasta 1933, año en que aprobó la cátedra del Instituto a través de concurso libre. En su hoja de servicios también aparece que fue nombrado por la Facultad de Ciencias profesor ayudante gratuito de Física para médicos a lo largo del curso 1930-31.

Creemos que Germán Araujo llegó al Instituto de Teruel a lo largo del curso 1932-1933, esto es, con unos 28 años tras haber ganado por oposición la plaza de catedrático de Matemáticas y siendo designado secretario del Centro mediante decreto de 22 de junio de 1933 (Gaceta de Madrid) con un complemento de 400 pesetas. A partir de aquí, compartirá el liderazgo del equipo gestor del Centro educativo con Joaquín de Andrés como director.

Es posible que antes de llegar a Teruel Araujo ya estuviese afiliado a las Juventudes Socialistas (JJ.SS.) y que en la ciudad continuase militando en la organización juvenil que desde junio de 1931 ya funcionaba en la capital bajo la dirección de Nicolás González. También creemos que su militancia sindical en la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE-UGT) fue anterior a su llegada a Teruel.

Lo cierto es que Germán desarrolló un buen número de actividades en la capital turolense a lo largo de la primavera-verano de 1934 entre las que destacamos la celebración de dos mítines en los que actuó presidiendo los actos: uno el 22 de abril en la Casa del Pueblo organizado por las JJSS en el que hablaron Palmira Plá, Secundino R. Palacios y el propio Araujo, y otro con motivo del 1º de Mayo en el cine-teatro Marín para recaudar fondos para la formación del Frente Único. Estas informaciones proceden del semanario ¡Adelante!, portavoz del PSOE y de la UGT turolenses fundado en 1930.   

No es de extrañar que este activismo  le pasara factura y fuera la razón por la que Araujo junto a José Millán, que era en esos momentos era secretario de la Casa del Pueblo, y otros dos socialistas, fueran sometidos en mayo de 1935 a un consejo de guerra en Teruel "acusados de haber dirigido los movimientos revolucionarios registrados en la provincia en el pasado mes de octubre" pese a que, según nuestras informaciones, los "sucesos" de principios de octubre de 1934 apenas tuvieron repercusión en la ciudad.

Habían pasado más de seis meses y la sentencia no pudo ser más grave: tres años de cárcel para cada uno. No solamente era condenado, sino que también era separado del ejercicio como catedrático y del escalafón, así que Araujo fue encarcelado en Navarra en el célebre monte Ezkaba (Fuerte de San Cristóbal), primero, y posteriormente fue trasladado con toda seguridad a Alicante. Volvió a Teruel en marzo de 1936, tras la amnistía del Frente Popular, se le realizó un homenaje de recibimiento en Madrid y luego otro en Teruel además de ser rehabilitado en su puesto como catedrático y secretario del Instituto.

Todavía ocupó un cargo político temporal Araujo antes de la sublevación militar del 18 de julio de 1936 ya que fue elegido compromisario por la provincia de Teruel para participar en la elección del Presidente de la II República en el mes de mayo tras la destitución de Alcalá-Zamora por parte de las Cortes.

La ejecución de Germán Araujo, con 31 años, se produjo los últimos días de julio de 1936, tal vez el 30, o en los primeros días de agosto, pero lo cierto es que no sabemos con exactitud la fecha ni seguramente el lugar. También es posible que permaneciera preso algún tiempo en los sótanos del Seminario de Teruel donde pudo coincidir con el otro catedrático, Joaquín de Andrés. El próxima y última entrega intentaremos aclarar estas cuestiones.