Medio centenar de adolescentes se dieron cita alrededor de la Mesa de Infancia

La Mesa de la Infancia de Teruel reunió este martes a medio centenar de menores para compartir juegos y socializar entre diferentes grupos y culturas. Esta Mesa está compuesta por diferentes entidades, asociaciones y organizaciones que trabajan en pro de la infancia y la juventud en Teruel. El objetivo es la coordinación de sus miembros para optimizar los recursos y servicios que se prestan a la infancia y la juventud en Teruel.

Antes de comenzar las actividades, los pequeños de entre 8 y 15 años, recibieron un kit de merienda compuesto de un brick de zumo de frutas a elegir entre melocotón o piña y un blíster de cacao y palitos para untar, y que degustaron placenteramente antes de iniciar los juegos. El medio centenar de adolescentes tenían como tutoras y tutores a un decena de monitores y varios voluntarios de Cáritas, Cruz Blanca, Ymca, Federico Ozanan o Cruz Roja, que se encargaron de controlar y encauzar la actividad.

Debido a las inclemencias meteorológicas no pudieron salir al aire libre y jugar al pañuelo, a la pelota u otros juegos de exterior, pero sí que compartieron Me crece la cicatriz, El inspector Robi, Caza Mostacho, Quien soy yo, El cerdito comilón u otros juegos interactivos en los que la participación es en grupo. Todos los juegos de mesa y materiales artísticos fueron cedidos por Marco Toy Planet, que gentilmente se prestó a colaborar en esta ocupación. “Los juegos son para que jueguen todos juntos y se mezclen”, comentó Alba Marco, coordinadora Provincial de Cruz Roja Juventud y monitora de esta actividad. Este es uno de los propósitos de esta reunión, pero también convertirlo “en una jornada de convivencia”, puntualizó Ivanna Buzzi, monitora de Cruz Blanca.
 

Los adolescentes estaban encantados de poder compartir con otros compañeros de otras entidades los juegos y poder conversar con nuevos amigos. “Quiero jugar con más niños y conocerlos. Me parece muy interesante y divertido”, indicó Reham Echcharquaoui, de 11 años. A su lado estaba su amiga Zaiba Ghazanby, de 12 años, que también opinaba parecido: “pasármelo bien y aprender nuevos juegos”, matizó.

Un poco más dicharachero estaba Lenny Jiménez que tenía algo más claro que quería hacer en este encuentro: “Quería venir porque aún no había estado aquí jugando y quiero conocer a nuevos niños”, finalizó

La amplitud de las instalaciones de San Nicolás de Bari que regenta Cáritas Diocesana de Teruel y Albarracín son un espacio muy apropiado para la realización de este tipo de actividades, pues posee distintas áreas para la realización de juegos en el exterior o salas en las que se puede albergar a un buen número de participantes.

Esta actividad tiene una especial relevancia ya que va dirigida a aquellas niñas y niños en situación de vulnerabilidad, a fin de favorecer el acceso a los mismos servicios, recursos y actividades que sus iguales. Esta reunión de la Mesa de la Infancia tiene una periodicidad trimestral, en la que se ofrece un espacio de ocio y esparcimiento a la par que integrador para las niñas y niños participantes.