Plantean crear un "catastro de ruinas" para detectarlas en los pueblos y actuar sobre ellas

Conocer la situación en la que está el parque inmobiliario en cada uno de los pueblos, las ruinas que hay en él y qué posibilidades existen para actuar sobre ellas. Todo ello a partir de la creación de lo que denominan un “ruinastro”, que es un catastro de ruinas que puede servir a los ayuntamientos para articular, a partir de la detección, los expedientes que permitan la demolición y posterior venta de los solares o la exigencia de una recuperación de esos inmuebles por parte de los propietarios.

Esta es una de las conclusiones a las que se ha llegado a través de un informe arquitectónico encargado por la Asociación Tierras Sorianas del Cid sobre la vivienda en el medio rural y en el que también han colaborado otros organismos, como la SSPA, Red de las Áreas Escasamente Pobladas.

El estudio se presentará en  enero, pero la arquitecta técnica Rosario Alcantarilla, que es una de las autoras del mismo, adelantó algunas conclusiones en la Feria Presura celebrada el pasado mes de noviembre en Soria, como que la demanda es mucho mayor a la oferta y además las viviendas disponibles no se publicitan y no llega a portales inmobiliarios a los que tienen acceso los urbanitas.

El parque inmobiliario de las zonas rurales está inmovilizado e infrautilizado, con casas en ruinas y otras que apenas se ocupan una semana al año. También hay una falta de relevo generacional en el sector de la construcción y escasean profesionales especializados en eficiencia energética. Todos estos datos se desprenden del informe, que aún no se ha presentado pero cuyas primeras conclusiones ya se adelantaron en noviembre en Soria.

Que el parque está inmovilizado e infrautilizado es algo que ya conocen las personas que demandan o han buscado vivienda para alquiler o compra en el medio rural. Realidad que ahora se constatan a través de un documento profesional: “Eran cosas que se intuían, que hemos reforzado con datos y que se dan en todos los territorios”, destacó Alcantarilla.

Inspección de edificaciones

Otra de las opciones que resultan recomendables para impulsar la ocupación de vivienda ahora infrautilizada es la realización de Rural-ITE, una inspección técnica de edificaciones adaptada al medio rural para conocer en qué estado se encuentran “y qué hay que hacer para sean habitables y accesibles”, dijo Alcantarilla, quien precisó que no se trata únicamente de que no se caigan, “sino de que estén medianamente habitables” y darles uso.

La arquitecta técnica indicó que mientras las ruinas no cuestan dinero, los Ayuntamientos no ponen en marcha mecanismos para evitar el enfrentamiento con las viviendas.

Del documento que se ha elaborado a instancias de Tierras Sorianas del Cid  se desprende la necesidad de crear estructuras supramunicipales que articulen las soluciones que, en muchos casos, pasan por decretar expedientes de ruinas que obliguen al propietario a dar salida a esos inmuebles. Otro de los planteamientos que se contempla en el informe técnico es la posibilidad de firmar contratos de arrendamiento a largo plazo que pasen por la rehabilitación de la vivienda en pago del arrendamiento.

Por otro lado, según detalló la experta, hay mucha más demanda tanto de alquiler como de compraventa que de oferta real. Concretó que la oferta en venta no se visibiliza al exterior lo suficiente ya que no llega a los canales masivos. “Los portales inmobiliarios reflejan solo una pequeña parte”, apostilló, y esta falta de visibilidad repercute a su vez en los nuevos pobladores.

Varias fases

El informe se divide en varias fases, en una de ellas se ha hecho un abordaje demográfico y de la vivienda. Por otro lado, se han planteado propuestas relacionadas con las problemáticas detectadas en el informe y siempre desde el punto de vista de su aplicación.

Los expertos concluyen que la solución no es fácil puesto que sería necesario generar infraestructuras supramunicipales o articularlas a través de agrupaciones de municipios, comarcas o grupos de acción local que tienen ya una cohesión territorial.

No obstante, la arquitecta técnica precisó que a corto plazo se van a articular ayudas desde Europa que van a estar “muy condicionadas a la reducción de emisiones de CO2 y a garantizar un parque de viviendas accesibles”. Se trata de subvenciones que podrán solicitar tanto propietarios como arrendatarios pero recalcó que sería muy conveniente contar con esa entidad supramunicipal para que las articule “y disponga de los técnicos cualificados para desarrollarla”, dijo.

Entre las propuestas está la creación de una figura de carácter empresarial que articule distintos programas en función de las necesidades específicas del territorio y priorice las líneas de actuación. Así, la responsable  plantea que hay lugares donde es necesario activar el parque de vivienda pública mientras que en otros lo conveniente es establecer un sistema de garantías para dinamizar el alquiler. “Lo primero es saber qué es lo que hace falta en cada sitio”, argumentó Alcantarilla.

Acupuntura urbana

Una de las opciones que barajan los arquitectos autores del estudio para mejorar la habitabilidad de los ediciones  es lo que ellos denominan “acupuntura urbana” que consiste en reactivar espacios que no tienen que volverse a construir, pero sí darles nuevos usos, como patios que pueden unirse a casas para hacerlas mas atractivas o espacios públicos.

En cuanto a las soluciones ya existentes en otros territorios,  Rosario Alcantarilla citó Cataluña, donde el acceso a la vivienda está legislado, y Galicia, donde se producen contratos internos que redundan en la movilización del parque.