Equipos y aficionados dinamizan la hostelería en Alcañiz y alrededores durante Moto GP

La presencia del mundial de motociclismo y las 13.578 entradas despachadas para el Gran Premio de Aragón de MotoGP se tradujeron en “buenas ventas” para el sector hostelero del Bajo Aragón y comarcas limítrofes, aunque lejos de las cifras que se alcanzan en un año de normalidad, cuando se dan cita en el circuito más de 60.000 personas.

Aún así, “toda la semana han estado todos los hoteles llenos en Alcañiz con los equipos, y durante el fin de semana pueblos de alrededor como Andorra, Calanda o Alcorisa han tenido bastante ocupación, entre el 70 y el 80%”, resumió el presidente de la Asociación Teruel Empresarios Turísticos, Roche Murciano.

Las más de mil camas que ofertan los alojamientos pertenecientes a la Asociación Turismo Bajo Aragón se han agotado, si bien hasta última hora no se confirmaron las últimas reservas. “Desde el miércoles fuimos derivando gente a Andorra-Sierra de Arcos, Bajo Martín, Bajo Aragón-Caspe, Matarraña y Maestrazgo”, dijo la gerente de la asociación, Nieves Ballesteros.

La pandemia ha hecho que las reservas hayan sido poco fiables. “La gente hacía una pre reserva, la cancelaba, volvía a reservar y así hasta en cinco ocasiones en algunos alojamientos, algo que no es habitual pero que es propio de este tiempo en el que la gente espera hasta el final”, explicó.

Por otra parte, “ha habido mucha gente que hacía una reserva inicial y después se daba cuenta de que quedaba lejos del circuito, entonces intentaba acercarse y cuando lo lograba cancelaba la anterior”, apuntó.

Las reservas de equipos y profesionales que rodean el circo de la MotoGP se realizan de un año para otro, y pernoctan “cinco o seis días”, mientras que las compras de los aficionados suelen ser más de última hora y suelen hacer “jueves, viernes y sábado, que también es una buena reserva”, apuntó Ballesteros.

Con todo, “podemos hablar de un fin de semana bueno, pero no ha sido como otros años en los que venían cerca de 70.000 personas, con música, fiesta y despiporre”, dijo Murciano. “Este año ha sido más tranquilo y, aunque ha habido muy buenas ventas, obviamente no ha sido como en años anteriores a la pandemia”.

No obstante, el representante de los empresarios turísticos de la provincia valoró positivamente que las autoridades sanitarias hayan abierto el circuito al público, al tiempo que saludó la inminente relajación de las medidas contra el Covid, como la apertura de barras en los bares.

“Tenemos que conseguir que no se pierda MotoGP para el Bajo Aragón porque es una inyección económica total durante casi todo el año, pues hay competiciones casi cada fin de semana y equipos que vienen a entrenar”, manifestó Murciano, que comparó el impulso de Motorland en Alcañiz y alrededores con el de Dinópolis en Teruel. “Hay cuatro o cinco cosas que no se pueden tocar y una de ellas es MotoGP, aunque tenga que pinchar dinero, porque luego revierte en la economía”, defendió.