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‘Raíles, el tren que soñamos’ recupera la memoria de la vía del Val de Zafán ‘Raíles, el tren que soñamos’ recupera la memoria de la vía del Val de Zafán
La maqueta de la estación y el tren en movimiento son los grandes protagonistas. Ayuntamiento de Alcañiz

‘Raíles, el tren que soñamos’ recupera la memoria de la vía del Val de Zafán

La exposición estará instalada en el Hogar del Pensionista de Alcañiz hasta el 7 de enero
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El Hogar del Pensionista de Alcañiz acoge estos días la exposición Raíles, el tren que soñamos, una propuesta cultural impulsada desde la Concejalía de Patrimonio del Ayuntamiento de Alcañiz que invita a redescubrir la historia ferroviaria del territorio a través de una mirada didáctica para todos los públicos. La muestra plantea un recorrido cronológico por la evolución de la antigua vía del Val de Zafán, un proyecto ferroviario clave para el desarrollo del Bajo Aragón y que nunca llegó a culminarse en su totalidad.

Según explicó el concejal de Patrimonio, Carlos Andreu, la exposición pretende mantener viva la memoria de una infraestructura que marcó durante décadas la vida económica y social de la comarca, al tiempo que se acerca este legado a las nuevas generaciones desde un enfoque accesible y pedagógico.

Recorrido

La exposición se articula a partir de paneles explicativos con mapas de época, fotografías históricas de locomotoras y estaciones, así como documentación gráfica que permite seguir la evolución del trazado ferroviario desde sus orígenes hasta su cierre definitivo. El visitante puede contextualizar así el papel que tuvo el ferrocarril en la vertebración del territorio y en la conexión del Bajo Aragón con otros puntos del valle del Ebro y el Mediterráneo.

Entre los contenidos audiovisuales destacan varios vídeos procedentes del archivo de Televisión Española, que ayudan a comprender el impacto social y económico del tren en distintas etapas históricas, reforzando el carácter divulgativo de la muestra.

Uno de los principales atractivos de la exposición lo constituyen las maquetas ferroviarias de distintas escalas, muchas de ellas de gran antigüedad y singularidad. Se trata de piezas de la desaparecida marca Payá, referentes del juguete ferroviario español, que permiten observar locomotoras, vagones y estaciones reproducidos con notable detalle.

Junto a estas maquetas se exhiben recortables originales de las décadas de 1940 y 1950, sellos de distintos países dedicados al ferrocarril, décimos de lotería y catálogos de coleccionista.

La exposición ha contado con la colaboración del Museo del Juguete de Urrea de Gaén, el Museo del Ferrocarril de Nonaspe y varios coleccionistas particulares de Alcañiz y Zaragoza, que han cedido temporalmente piezas de gran valor histórico y sentimental.
 

Mayores y niños se han acercado estos días a ver la exposición. Ayuntamiento de Alcañiz

 

El tren carbonero

Otro de los elementos destacados es el diorama ferroviario en funcionamiento, en el que un tren recorre un circuito circular junto a la maqueta de la antigua estación de ferrocarril de Alcañiz. Este edificio, actualmente en desuso, pasará a ser de titularidad municipal el próximo año tras el proceso de cesión por parte de ADIF, lo que abre nuevas posibilidades para su recuperación patrimonial.

El tren representado corresponde al antiguo tren carbonero que cubría el trayecto entre Tarragona y la central térmica de Andorra, una infraestructura hoy desaparecida. La muestra subraya así la pérdida de un importante patrimonio industrial de la provincia y plantea una reflexión sobre la necesidad de preservar y explicar este pasado reciente.

Coincidiendo con el periodo de vacaciones escolares, la exposición está especialmente orientada a niños y escolares. Se han habilitado mesas para la realización de talleres de pintura y coloreado con motivos ferroviarios, así como recortables de época de estaciones y vagones, reforzando el componente lúdico de la propuesta.

Además, la iniciativa incorpora una rifa benéfica a favor de la Asociación de Alzheimer de Alcañiz. Por un donativo de tres euros, los participantes reciben un recortable de la estación y entran en el sorteo de una maqueta antigua de tren, integrando así un componente solidario en la actividad cultural.

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