Teruel Existe volvió al Regallo para exigir la construcción urgente de la autovía A-68

El Movimiento Ciudadano Teruel Existe volvió a concentrarse este domingo en el Regallo de Alcañiz para reclamar la construcción de la autovía A-68, una infraestructura que existe sobre el papel y como demanda social, pero que continúa sin materializarse tras más de dos décadas de promesas incumplidas. La protesta coincidió con el primer aniversario de la movilización celebrada en el mismo punto el 28 de diciembre de 2024, en la que el colectivo denunció lo que calificó como “la inocentada” de seguir esperando esta autovía. La concentración, convocada a las 11.00 horas, incluyó una ‘performance’ reivindicativa dirigida tanto al Ministerio de Transportes como al Departamento de Fomento del Gobierno de Aragón. Con este acto, Teruel Existe quiso visibilizar de nuevo una reivindicación que considera clave para la vertebración territorial de la provincia y, en especial, del Bajo Aragón Histórico.
 

El coordinador general de Teruel Existe y diputado en las Cortes de Aragón, Tomás Guitarte, centró buena parte de las críticas en la falta de voluntad política para ejecutar una infraestructura que considera prioritaria. “Nos reunimos el Día de los Santos Inocentes para denunciar que nos están tomando constantemente el pelo con las infraestructuras en la provincia de Teruel y, en concreto, con la A-68”, afirmó. Guitarte recordó que desde 2019 existen proyectos redactados que permitirían licitar las obras, pero denunció que “no existe voluntad política para hacerlo”. El dirigente de Teruel Existe contrapuso la situación de la A-68 con otras inversiones estatales y defendió la urgencia de la autovía por motivos de seguridad y desarrollo. “Mientras el Ministerio se dedica a prometer AVE a 350 kilómetros por hora, aquí seguimos con una carretera nacional que, solo por cuestiones de seguridad, debería haberse convertido ya en autovía”, señaló. En este sentido, subrayó que “la A-68 no es solo una cuestión de seguridad, también lo es de oportunidades de desarrollo para el territorio”. Guitarte insistió en que la falta de infraestructuras condiciona la llegada de proyectos empresariales y frena la reindustrialización del Bajo Aragón. “Sin autovía es muy difícil que haya desarrollo, porque las decisiones empresariales se toman donde la infraestructura ya existe”, explicó, añadiendo que “aquí no se trata de generar demanda para que luego se construya la autovía, sino de hacer primero la autovía para que pueda llegar la actividad económica”. Según advirtió, la ausencia de esta vía de alta capacidad ha provocado que “la potencial demanda desaparezca y que las empresas se vayan a otros territorios”. Además, reclamó compromisos presupuestarios concretos. “Si va a haber Presupuestos Generales del Estado en 2026, exigimos partidas suficientes para licitar los tres tramos que ya tienen proyecto y dar orden de estudio a los restantes”, afirmó, recordando que, incluso iniciándose ahora, “tardaríamos una década en tener la autovía completa, por lo que no podemos permitir que se retrase ni un año más”.
 

Durante la concentración también intervino el portavoz de Teruel Existe en el Bajo Aragón, Diego Moreno, quien puso en valor el trabajo realizado por el movimiento ciudadano a lo largo del último año. “Queríamos volver al Regallo para recordar todo un año de trabajo constante, con movilizaciones, ‘performances’ y recogidas de firmas en muchos puntos de Aragón”, explicó. Moreno lamentó que “el esfuerzo ciudadano no haya tenido respuesta política” y defendió que la A-68 es “una infraestructura absolutamente necesaria para vertebrar el Bajo Aragón y toda la provincia de Teruel”. Por su parte, el coordinador de Teruel Existe en Alcañiz, Jorge Santafé, expresó el malestar del colectivo por la siniestralidad registrada en la N-232. “Cerramos el año con ocho víctimas mortales, y eso es consecuencia directa de no hacer las obras”, afirmó, al tiempo que denunció que “en otras zonas se siguen licitando tramos mientras el Bajo Aragón vuelve a quedarse a la cola”.
 

La lectura del manifiesto cerró el acto con un mensaje unitario y sin siglas, en el que Teruel Existe volvió a calificar la A-68 como una deuda histórica con la provincia y con las comarcas del Bajo Aragón. Los convocantes reclamaron el inicio inmediato de las obras, recordaron que existen tres tramos con proyecto constructivo redactado y exigieron que los Presupuestos de 2026 incluyan las partidas necesarias para su licitación, rechazando cualquier rebaja en la tipología de la infraestructura. La movilización concluyó con un llamamiento a mantener la presión social e institucional hasta que la autovía sea una realidad, convencidos de que la A-68 no es una promesa más, sino una infraestructura imprescindible para mejorar la seguridad vial, atraer oportunidades y frenar el declive demográfico y económico del territorio.