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El propietario del castillo de Linares, Esteban Ribera, lo deja en herencia al Ayuntamiento El propietario del castillo de Linares, Esteban Ribera, lo deja en herencia al Ayuntamiento
El castillo de Linares de Mora está situado por encima del casco urbano de la localidad

El propietario del castillo de Linares, Esteban Ribera, lo deja en herencia al Ayuntamiento

Ahora el consistorio va a buscar la manera de excavar el monumento y consolidar sus restos
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Cruz Aguilar

El Ayuntamiento de Linares de Mora ya tiene en propiedad el castillo de la localidad, después de que su anterior dueño, Esteban Ribera Eced, se lo legara en su testamento. El hombre, que es descendiente del obispo Pedro José Fonte, falleció el pasado 24 de mayo a los 96 años.

La alcaldesa de Linares, Yolanda Sevilla, mostró su agradecimiento por este legado ya que, indicó, habían intentado obtener una cesión temporal o un acuerdo de compra a un precio simbólico, con el fin de poder actuar en él, pero sin éxito.

Sevilla indicó que Ribera era un hombre muy discreto y quería hacer la donación así, sin grandes alardes. Se trata de un filántropo muy interesado por el patrimonio cultural de Linares y es propietario de una casona declarada Bien de Interés Cultural (BIC) que perteneció a Fonte y en la que conserva todas las estancias que usó el obispo. "Su hijo nos ha trasladado que al ver la preocupación cultural que había por Linares, decidió cederlo en su testamento", argumentó

En cuanto al castillo, la familia Ribera nunca llevó a cabo actuaciones de conservación o mejora, pero sí realizó obras puntuales en los momentos en que hubo desprendimientos sobre los tejados de las viviendas situadas debajo, costeando también las reparaciones, apuntó Sevilla.
 

Esteban Ribera

La alcaldesa expuso que tienen varios proyectos, informes y memorias propuestas para realizar en cuanto les sea posible un trabajo de desescombro, acompañado de la pertinente excavación arqueológica y de una consolidación de los restos.

Yolanda Sevilla indicó que lo más complejo para llevar a cabo la actuación es el acceso al castillo, ya que está situado en una zona donde sólo es posible llegar a pie y no hay anchura para movilizar ningún vehículo a motor. "Sólo pasa una carretilla por detrás de la iglesia y hay otra zona más cómoda para subir, pero no entra ni un dúmper", argumentó. Por eso, planteó que una de las opciones que barajan para realizar los trabajos son medios aéreos. El castillo "se ha hundido dentro de sí mismo", y están todos los escombros amontonados de forma que los muros que todavía se conservan podrían colapsar. El castillo está ahora vallado para evitar el acceso de curiosos debido al riesgo de caídas que entraña.

Por su parte, el arqueólogo e historiador Javier Ibáñez matizó que es una fortificación de la Mitra del Arzobispo de Zaragoza y existe una descripción muy detallada de cómo era en el siglo XVI. Guarda muchas similitudes con el castillo de Puertomingalvo, relató Ibañez, quien precisó que posiblemente se construyó en el siglo XIII y se asentó sobre una fortaleza andalusí anterior.

El experto en historia comentó que el castillo conserva más restos de los que aparenta y avanzó que, cuando se retiren los dos metros de escombros, saldrán muros de cierta entidad que, de forma paralela a la excavación arqueológica, habrá que ir consolidando. El siguiente paso será, dijo, "ir pensando en cómo musealizarlo y hacerlo visitable".

Javier Ibáñez planteó que el hecho de que sea de propiedad municipal abre la vía del 2% Cultural que concede el Gobierno de España para intervenciones de esta índole.

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