Síguenos
Los jóvenes de Gúdar-Javalambre demandan movilidad entre pueblos y espacios de ocio Los jóvenes de Gúdar-Javalambre demandan movilidad entre pueblos y espacios de ocio
En las mesas de trabajo del encuentro en mayo se habló de las motivaciones de los jóvenes de Gúdar-Javalambre

Los jóvenes de Gúdar-Javalambre demandan movilidad entre pueblos y espacios de ocio

El 68,3% de la juventud desea vivir en su pueblo, aunque ven difícil trabajar de lo que han estudiado
banner click 244 banner 244
banner click 236 banner 236
Cruz Aguilar
Puntos de encuentro para jóvenes en los que haya elementos de diversión como un futbolín o una mesa de ping-pong y un transporte económico para moverse entre los pueblos y relacionarse con amigos de otros lugares son las principales demandas de la juventud de la comarca de Gúdar-Javalambre. La información se desprende de un estudio llevado a cabo por la educadora social Andrea Roche en el marco de su Trabajo de Fin de Grado (TFG) para la Universidad de Valencia que lleva por título Los procesos participativos como motor para el desarrollo rural: la perspectiva de las personas jóvenes de Gúdar-Javalambre.

La joven, que es de Teruel, estuvo realizando prácticas en el grupo de acción local Agujama y durante las mismas llevó a cabo una encuesta que respondieron de forma válida un total de 60 personas de 14 localidades diferentes. Además, el trabajo se completó con un encuentro que tuvo lugar en La Puebla de Valverde, donde asistieron 14 jóvenes que analizaron sus necesidades a través de tres mesas de trabajo. La investigadora explicó que las personas que respondieron a la encuesta eran de menor edad que los que asistieron a la jornada de La Puebla, entre los que se detectó una mayor preocupación por el tema de la vivienda. “Dos de los tres grupos coincidieron en que son necesarias facilidades para el alquiler y para comprar terrenos donde construir sus casas”, dijo.

No quieren emigrar


La mayoría de los consultados, el 68,3%, quieren seguir viviendo en sus pueblos aunque consideran que tienen difícil encontrar un empleo especializado en lo que se han formado. En las encuestas muchos respondieron que no hay empleo, según relató la educadora social, quien precisó que realmente “sí que hay, pero no el que ellos buscan porque está relacionado con sus estudios. Hay trabajo pero no tan especializado”, recalcó.

Por eso, una de las posibles alternativas a tener en cuenta para el futuro es formarse en aquello para lo que hay demanda y, según materializaron los jóvenes, sería importante que la formación que se imparte en la zona estuviera vinculada a los sectores que solicitan profesionales, como la hostelería o la astronomía.

En cuanto a las motivaciones que les llevan a querer vivir en su pueblo, un 60% habla de la calidad de vida como un factor determinante, mientras que otro porcentaje muy amplio cita al arraigo que tienen hacia el municipio que les ha visto crecer. La amistad y la familia o la red social cercana en las comunidades rurales son otros de los factores.

La mayor parte de los participantes en el encuentro de La Puebla de Valverde eran de la propia localidad, donde una de las ventajas, a su juicio, es la cercanía con la capital turolense, lo que les permite tener un empleo más especializado pero seguir residiendo en su pueblo.

En lo que se refiere a los puntos de encuentro, Roche precisa que habilitar estos espacios no resulta complejo para los Ayuntamientos, que cuentan con locales disponibles y que, en muchas ocasiones, no se adaptan a las necesidades de los chavales porque ni siquiera se ha pensado en ellos. Contar con estos espacios de ocio supondría una alternativa a las peñas, más vinculadas en  ocasiones al consumo de alcohol.

Otra de las demandas entre los jóvenes es un mayor número de actividades de ocio organizadas, pero en este sentido la investigadora planteó que oferta sí hay –según se desprende de la respuesta de otros muchos participantes– pero el problema radica en que falta difusión sobre las mismas y comunicación entre los interesados. “Muchas veces no salen por falta de inscritos y lo que se observó es que una posible solución es ponerse de acuerdo entre los participantes sobre la actividad a realizar con el fin de contar con suficiente público para llevarla a cabo”, aseguró.

Educación social


Andrea Roche explicó que aunque la Educación Social es una carrera con muchos ámbitos de intervención, en el aula no se trata la despoblación, “un tema que se puede abordar” perfectamente y por eso ha centrado en ella todos sus trabajos. “La formación me da muchas herramientas para promover el desarrollo que tanto se necesita en el medio rural”, aseguró.

Durante las prácticas detectó que los trabajos que se están realizando en el medio rural para frenar la despoblación no atienden a uno de los pilares de futuro en cualquier pueblo, que es la juventud. “Falta contar con la gente joven y saber lo que necesitan para quedarse a vivir en los pueblos”, dice. Entre las carencias localizadas está que “se les haga caso y sacar la potencialidad que muchos de ellos tienen”.

La titulada en Educación Social planteó que esta ciencia tiene muchos puntos coincidentes con el desarrollo rural puesto que ambos buscan “un proceso de cambio dentro de un territorio y desde la educación social es posible lograr la participación de la gente para promoverlo.

Las dos principales acciones que desarrolló Roche durante su periodo de prácticas en Agujama, que se prolongó durante cuatro meses, fue la encuesta entre los jóvenes de Gúdar-Javalambre y la organización del encuentro para contactar con ellos directamente y conocer mejor sus inquietudes.

 

El redactor recomienda