El grupo Albishara lleva a las pedanías las peripecias de personajes históricos turolenses

La historia se queda mejor en la memoria si se cuenta de forma amena. Y eso lo saben hacer muy bien los integrantes del grupo Albishara. Durante este mes de mayo y hasta el primer fin de semana de junio están recorriendo las diez pedanías turolenses para hablar de personajes históricos turolenses que en su día fueron muy relevantes pero que han caído en le cajón de los olvidos para muchos. Se trata de Clemente VIII, el antipapa que nació en Teruel y vivió en el siglo XV, y de Francés de Aranda, un destacado estadista de la época que participó en el Compromiso de Caspe donde parece ser que no se llevaba muy bien con Vicente Ferrer, según se deja caer en la representación.

La obra viaja todavía más atrás en la historia y los actores del grupo Albishara ofrecen su particular versión de la rivalidad por construir las torres mudéjares de San Martín y El Salvador.

El ciclo Historias y Leyendas pasa el ecuador de su programación de esta segunda edición. Ayer hubo representaciones en El Campillo y San Blas. Y todavía quedan el 29 de mayo a las 12 horas en Villalba Baja y a las 18 horas en Tortajada y el 5 de junio a las 12 horas en Valdecebro y a las 18 horas en Villaspesa.

Organizado por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Teruel, el objetivo es llevar actividades culturales a los barrios pedáneos dirigidos a públicos de todas las edades, como se pudo comprobar ayer en El Campillo.

Trabajo de documentación

La diversión, con guiños a la actualidad, está garantizada en estas representaciones, pero detrás hay un trabajo de investigación y documentación para hacer los guiones, con gran imaginación a la hora de conectar personajes, historia y leyendas. Los actores de Albishara dan vida a personajes que aparecen en la techumbre mudéjar de la Catedral, como son los carpinteros o el clero, creando fricciones y conflictos entre ellos, que despierta la risa entre el público porque reflejan escenas cotidianas que también se dan en la actualidad.

La techumbre parece no ser del gusto del antipapa Clemente VIII que quiere “adecentar la iglesia de Santa María” para que la plebe se quede “extasiada y embobada” y Teruel se convierta “en el faro de Occidente y la envidia de la cristiandad”. Una meta que no está muy claro que lo vaya a poder conseguir. Para saberlo habrá que ir a la próxima representación.