Perales del Alfambra vive una gran jornada de rugby

El pequeño municipio turolense de Perales del Alfambra vivió este fin de semana una jornada deportiva y festiva con la celebración de la VIII edición del Torneo del Jamón de Rugby, organizado por el Club Rugby Teruel Mudéjar. El evento reunió a equipos masculinos y femeninos en una tarde marcada por el buen ambiente, la convivencia y el respeto del tiempo, ya que las tormentas que afectaron a pueblos vecinos dejaron en paz a Perales y al Centro Deportivo La Estación.

La actividad comenzó por la mañana con la jornada de escuelas de rugby, en la que niños y niñas disfrutaron de entrenamientos y juegos bajo la atenta mirada de sus familias. Una experiencia que acercó este deporte a los más pequeños y contribuyó a consolidar la cantera del rugby en la provincia.

Por la tarde se disputó un torneo triangular de categoría masculina, con la participación del combinado formado por el rugby Penyagolosa y el Estreles de Morvedre, el Ibero de Zaragoza y el Club Rugby Teruel Mudéjar, que ofrecieron espectáculo, intensidad y compañerismo al público asistente.

La jornada comenzó con el saque inicial a manos de Ixeya Moreno, jugadora del Club Rugby Teruel y natural de Villalba Alta. El torneo ofreció tres partidos muy disputados, que dejaron como vencedor al combinado del Penyagolosa y Estreles, como segundo clasificado al Ibero de Zaragoza y en tercer lugar al equipo anfitrión, que pese al resultado salió muy orgulloso tanto de la organización como de la imagen ofrecida en el campo de juego.

Tras los encuentros se celebró la tradicional entrega de trofeos, en la que el jamón de Teruel, como no podía ser de otro modo, fue el gran protagonista. Para la entrega, se contó con la presencia de María Pilar, Vanesa y Daniel, concejales de Perales del Alfambra.

Los trofeos se basaron en productos locales, se repartieron quesos de Granja Perales a los capitanes de los tres equipos, varias docenas de Huevos Guillén a los jugadores más valiosos de cada equipo. Por supuesto hubo un jamón de D.O. de Teruel, el cual se entregó a una de las figuras primordiales en un partido de rugby, al colegiado Manu Aguiar, el cual se desplazó desde Valladolid para dirigir los encuentros.

También se hizo entrega a todos los participantes a modo de medalla, de un plato de jamón cortado a cuchillo y envasado al vacío, por el cortador profesional y jugador del Club Rugby Teruel Mudéjar, Camilo Robayo. Esta combinación de trofeos de productos locales, refuerza la unión entre deporte, gastronomía y territorio.

Al respecto de la jornada, el alcalde de Perales del Alfambra, Pedro Polo, señaló: “Estupenda jornada de rugby y convivencia en Perales. Nos estamos acostumbrando a ver por nuestro pequeño pueblo a deportistas pasear por las calles, tomar algo en el bar o llenar de actividad el entorno de La Estación. El centro deportivo se está consolidando poco a poco. Creo que salieron muy contentos con las instalaciones y disfrutaron de la práctica del rugby, tanto los mayores como los niños y niñas”.

Por parte del Club, el vicepresidente del Club Rugby Teruel Mudéjar, Levi Moreno, apuntó: “Este torneo demuestra que el rugby puede llegar a cualquier rincón de la provincia. Lo que hemos vivido en Perales es un ejemplo de cómo el deporte une, crea comunidad y transmite valores como el respeto, el esfuerzo y el compañerismo”.

Y, por último, el director técnico del equipo anfitrión, Sergio Sánchez, quiso agradecer la gran acogida que tuvo el equipo en Perales: “Para nosotros es un orgullo ver cómo la gente del pueblo y de localidades cercanas se acerca con curiosidad a disfrutar de un deporte que quizá no les era tan familiar. Hemos sentido mucho apoyo y eso nos da fuerzas para seguir creciendo.” Y respecto a lo deportivo comento: “este triangular nos da muchas pistas de lo que tenemos que trabajar cara a la temporada, al habernos enfrentado a dos equipos con más nivel del que esperamos encontrarnos en nuestra categoría”.

Con esta edición, el torneo confirma su consolidación como referente en el calendario rugbístico aragonés y como altavoz para reivindicar la vida en el medio rural.