La Subdelegación del Gobierno en Teruel aborda la atención a las víctimas de mutilación genital femenina

Más de cincuenta profesionales de diferentes ámbitos participaron este martes en la Subdelegación del Gobierno en Teruel en una jornada sobre la mutilación genital femenina, en la que se trató el abordaje integral de la Administración frente a esta práctica desde el sistema sanitario, la atención a las víctimas y las cirugías estéticas occidentales como una nueva forma de mutilación.

La Subdelegación del Gobierno en Teruel, a través de su Unidad contra la Violencia sobre la Mujer y en el marco del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, fue la encargada de coordinar la Jornada sobre la Mutilación Genital Femenina en la mañana de este martes. Entre 50 y 60 profesionales procedentes del ámbito social, jurídico, sanitario, policial y educativo participaron en este encuentro, que contó con tres mesas de trabajo en las que se analizaron desde diferentes perspectivas esta práctica tan extendida y que vulnera los derechos de las niñas y las mujeres.

La primera intervención corrió a cargo de Lucía Soraya Sánchez Fernández, matrona y sexóloga, que presentó un enfoque integral de la atención sanitaria a mujeres supervivientes de mutilación genital femenina. Sánchez subrayó la necesidad de que el personal sanitario cuente con formación específica, herramientas de detección y un enfoque intercultural, centrado en la paciente, que respete su dignidad y necesidades específicas.

En la segunda mesa, profesionales de la entidad social Hijas de la Caridad, con experiencia en el acompañamiento a mujeres migrantes a través del programa de atención humanitaria, compartieron testimonios reales de víctimas de esta práctica, visibilizando no solo el trauma físico y psicológico que deja en ellas, sino también los retos en su recuperación, integración y empoderamiento en contextos sociales y culturales distintos.

La tercera ponencia fue impartida por Isabel Ortega Sánchez, profesora de Antropología de la Universidad de Zaragoza, quien planteó una mirada crítica sobre las construcciones culturales del cuerpo femenino. Ortega comparó estas mutilaciones con ciertas cirugías estéticas promovidas en las sociedades occidentales, analizando cómo ambas pueden estar mediadas por la presión social y la falta de autonomía real sobre el cuerpo, lo que invita a repensar el concepto de mutilación desde una perspectiva simbólica y cultural.

La Subdelegación del Gobierno informó de que la mutilación genital femenina es un procedimiento en el que se extirpan parcial o totalmente los genitales femeninos, o se lesionan los órganos genitales a mujeres y niñas por motivos no médicos. Se trata de una violación fundamental de los derechos de la mujer que está muy extendida en países de África, Oriente Medio y Asia. Actualmente, más de 200 millones de mujeres y niñas son supervivientes en una treintena de países. Según las cifras de la Organización Mundial de la Salud, 15 millones de adolescentes de entre 15 y 19 años están en riesgo de ser mutiladas hasta el año 2030.

España no es ajeno a esta problemática como país receptor de migraciones procedentes de lugares donde se practica, y las administraciones públicas, los servicios sanitarios y las entidades sociales trabajan para prevenir su práctica. Desde la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer, Belén Fuertes incidió en la necesidad de seguir generando espacios de reflexión y formación.