La mirada de Concepción Gimeno regresa a Alcañiz 175 años después de su nacimiento

Concepción Gimeno Gil (y más tarde de Flaquer) fue una escritora nacida en 1850 en el castillo calatravo de Alcañiz. Periodista, conferenciante y autora que vivió a caballo entre España y América, que se ganó la vida con su trabajo y que pasó de la llamada “literatura femenina” decimonónica a un discurso abiertamente feminista. Defendió la educación de las mujeres como condición para regenerar el país, reclamó la igualdad salarial entre hombres y mujeres en la década de 1880 y fue la única gran figura de su generación que pidió el voto femenino, en un contexto social y político profundamente patriarcal.

Esa trayectoria, tejida entre concesiones a los códigos morales de su época y una evolución ideológica que hoy se lee como pionera, se presenta ahora en su ciudad natal en forma de relato completo. La Biblioteca Pública de Alcañiz acoge desde este miércoles la exposición Concepción Gimeno. 175 años de su nacimiento, un recorrido que ocupa las tres plantas del edificio: un primer nivel dedicado a su biografía, un segundo que la muestra como escritora Entre dos continentes y Orgullosa aragonesa, y un tercer espacio, bajo el título La cantora de la mujer, centrado en sus ideas y en la organización temática de sus textos. La muestra podrá visitarse hasta el 10 de enero de 2026, con horario de lunes a viernes de 9:00 a 20:00 y sábados de 9:00 a 14:00, y ofrece visitas guiadas concertadas.

Todo ese material, disperso durante décadas en archivos y bibliotecas de varios países, se encuentra ahora reunido y accesible en la biblioteca de la ciudad que la vio nacer, Alcañiz, gracias a un trabajo de investigación de largo recorrido dirigido por el profesor alcañizano Antonio Francisco Pedrós-Gascón, de la Universidad de Colorado.

Inauguración

La inauguración, celebrada este miércoles por la tarde, permitió al público entrar en el universo de Concepción Gimeno de Flaquer a través de una explicación detallada del profesor Pedrós-Gascón, que fue desgranando el contexto literario y social en el que surgió su obra. Antes de hablar de la exposición, propuso una lectura de conjunto del canon femenino del siglo XIX, evocando nombres como Fernán Caballero, Gertrudis Gómez de Avellaneda o Carolina Coronado para mostrar cómo las mujeres que escribían se veían obligadas a ajustarse a un modelo de autora “decorosa”, ligada a la poesía lírica, a la religión y al ideal del “ángel del hogar”.

Pedrós-Gascón insistió en que, si hoy se la lee sin tener presente su contexto, se corre el riesgo de etiquetarla como “conservadora de forma simplista”, sin valorar la carga de ruptura que tuvieron determinadas posiciones suyas en pleno siglo XIX. Subrayó, por ejemplo, su defensa temprana de la igualdad salarial y el hecho de que no procediera de la aristocracia ni de una alta burguesía acomodada, sino de una posición en la que tuvo que trabajar para sostenerse y sostener su actividad intelectual.
 

Secciones

La exposición arranca en la planta baja con una sección de carácter biográfico que sitúa al visitante ante la trayectoria vital de la autora. Desde el primer panel se recuerda su nacimiento en el castillo calatravo de Alcañiz.

La primera planta, bajo los epígrafes Una vida entre dos continentes y Orgullosa aragonesa, profundiza en su trayectoria transnacional: estancias en México, Buenos Aires, París, Barcelona y Madrid, producción que en México se estudia como literatura mexicana y en España como literatura española, y una presencia constante de Aragón en sus textos y en sus revistas. Fotografías antiguas de Alcañiz en el puente, el apeadero y la vía de tren del Zafán, ilustraciones del castillo, del arco de San Pedro o de joteras y campesinas de la zona muestran cómo supo incorporar imágenes y referencias de su tierra, gracias también a la red de contactos que le hacía llegar estos materiales.

En este nivel se exhiben, además, su partida de bautismo y su partida de defunción, que enmarcan de forma documental el recorrido vital que la exposición propone. La muestra incorpora códigos QR que permiten al visitante descargar en su teléfono los textos originales reproducidos en los paneles.

Uno de los elementos más relevantes de la exposición es el uso de documentación inédita procedente de la investigación de Antonio Francisco Pedrós-Gascón. Entre esos materiales destaca el extenso litigio de su testamento, que llegó hasta el Tribunal Supremo y ocupa más de 400 páginas. Ese pleito, trabajado con rigor académico, ha permitido reconstruir aspectos hasta ahora desconocidos o poco precisados: estructura familiar, patrimonio, relación con sus bienes, detalle de su ropa y, sobre todo, el alcance y composición de su biblioteca.

En esta misma planta se exhiben primeras ediciones de gran importancia para entender su perfil intelectual y literario. Aparecen varias de sus novelas, entre ellas Victorina o heroísmo del corazón, el único texto en el que se aborda directamente la figura de su madre. Se muestra también La mujer española, su primer libro de ensayo, dedicado al rey Alfonso XII, y el texto de la primera conferencia que impartió en el Ateneo de Madrid, una intervención que se produjo apenas tres años después de la primera conferencia de Emilia Pardo Bazán en esa misma institución.

La planta superior se dedica a la dimensión ideológica y ensayística de Concepción Gimeno, bajo el título La cantora de la mujer (como la conocían en México). Aquí se organizan sus textos por bloques temáticos, con vitrinas que recogen escritos de sus comienzos, centrados en la necesidad de educar a la mujer y en la convicción de que solo así la nación sería capaz de regenerarse, junto a textos de madurez con un tono feminista.

Durante la inauguración, Antonio Francisco Pedrós-Gascón subrayó que este trabajo de recuperación forma parte también de su compromiso como profesor universitario: la necesidad de que la universidad “no se quede solo en el aula” y mantenga un vínculo real con el territorio, acercando la investigación a la ciudadanía. Reivindicó que la figura de Concepción Gimeno ha sido decisiva en su trayectoria académica y personal, llevándole a impartir conferencias en Sicilia, Estados Unidos o México, mientras en su propio pueblo apenas era conocida. Definió la exposición como un acto de justicia poética para una autora que, según explicó, “levantó ampollas” en su tiempo por su manera directa de argumentar y su vehemencia al defender a las mujeres.

El concejal de Cultura, Javier Climent, destacó que la jornada tenía un carácter especial por coincidir con el 175 aniversario de una “gran alcañizana” nacida en un lugar tan simbólico como el castillo calatravo.

Por otro lado, el alcalde Miguel Ángel Estevan, agradeció al inicio el trabajo del investigador y de todo el equipo que ha hecho posible la muestra, y señaló que ahora los vecinos de Alcañiz pueden acercarse, en la propia Biblioteca Municipal, a una figura que integra la nómina de alcañizanos ilustres vinculados a la literatura, el periodismo y el pensamiento.