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Los niños ponen cara en Villarquemado  a los personajes de sus cuentos preferidos Los niños ponen cara en Villarquemado  a los personajes de sus cuentos preferidos
La bruja del cuento de Hansel y Gretel, espera en la puerta de su casa la llegada de los niños para que entren en su casa de chocolate recubierta de chucherías. Javier Escriche

Los niños ponen cara en Villarquemado a los personajes de sus cuentos preferidos

El Paseo de Cuento reúne cada domingo a decenas de familias de diversas procedencias
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Cruz Aguilar

Nadia, que tiene 8 años y vive en Teruel, comprobó ayer en Villarquemado que las casitas de Hansel y Gretel, las de los Tres Cerditos y el taller de Gepetto son tal y como las había imaginado tras leer los cuentos y ver las películas que protagonizan. Ayer, por fin, pudo ver su cara a tamaño real, al igual que Natalia, también de Teruel, que disfrutó, junto a su prima Laila, de un recorrido que le sorprendió: “Es mucho mejor a lo que me había imaginado”, destacó. Señaló, a modo de ejemplo, que la casita de Pinocho que ella había construido en su mente era más pequeña que la que recorrió ayer en Villarquemado, con sus dos pisos y una escalera de madera para subir.

Una madre, leyendo un cuento a su hijo en la Casa de los Libros. J. E.

Ayer el Paseo de Cuento estaba lleno de visitantes, principalmente familias con niños pequeños. El tiempo acompañaba y en poco más de una hora de apertura ya habían accedido al recinto en torno a un centenar de personas. “Es un buen lugar para ir con niños”, comentó Pilar, que estaba por la zona de turismo y se decidió a visitar el parque para así tener un rato entretenidos a sus hijos que, desde luego, no se aburrieron.

Jaula de la bruja

Está pensado específicamente para los niños. Allí encuentran a esos personajes que aparecen continuamente en los relatos que les leen y releen sus padres y pueden conocer todos los detalles de sus casas. Desde la jaula donde la bruja encerró a Hansel y Gretel al horno donde intentó cocinarlos o el banco de carpintero en el que nació Pinocho.

El cisne en el que se ha convertido el Patito Feo es uno de los grandes reclamos para los niños. Javier Escriche

Para los más aventureros hay un gran barco pirata con dos pisos y un tobogán y los que deseen tranquilidad la van a encontrar en la casa de los libros, un rincón diseñado para que los visitantes se sienten un rato a leer en familia o, si lo prefieren, en solitario. Otro de los espacios está ocupado por un gran ajedrez inspirado en el de Alicia en el País de las Maravillas donde no faltan los espejos.

El estanque del Patito Feo, con una noria que da vueltas, varios patitos en fila india y un cisne, es sin duda uno de los lugares preferidos para hacerse las fotos. El árbol donde viven las hadas o un laberinto, donde hace falta un poco de paciencia y algo de orientación para llegar a la torre central, son otras de las atracciones del espacio, que cada domingo, aunque haga mal tiempo, se llena de padres deseosos de que sus hijos se codeen con los personajes de los cuentos que cada noche les ayudan a dormirlos.

Niños de diferentes edades, en el barco pirata de Villarquemado. J. Escriche

“La verdad es que hemos cubierto un hueco que había en el mercado, ha sido un acierto total”, explicó el alcalde de Villarquemado, Federico Serrano, quien matizó que la zona adolecía de un espacio “para niños más pequeños”.

El paseo, junto al casco urbano y muy cerca de la Laguna del Cañizar, se acaba de ampliar con nuevos elementos y personajes. El Ayuntamiento quiere hacer también actividades y se convierta en un punto de referencia todos los fines de semana. Ahora están estudiando la programación que van a poner marcha, en la que habrá cuentacuentos y espectáculos dirigidos al público infantil. Durante la Semana Santa ampliará su horario de apertura y se podrá visitar más días. El precio es de 2 euros para los adultos y de 1 euro para los niños de entre 3 y 14 años, mientras que los empadronados en la localidad tienen el acceso gratuito.

Entre los visitantes que lo recorrían ayer estaba Teresa junto a su hermana y los tres hijos de ambas. “Es más grande de lo que pensábamos y nos está gustando mucho, sobre todo a los críos, que el parque de todos los días ya les aburren”, comentó.

El taller de Gepetto tiene dos plantas y se puede recorrer entero. J. E.

Patricia, su marido y sus hijos, son de Benidorm y se acercaron a Villarquemado porque habían visto un reportaje del espacio y decidieron incluirlo en su visita a Teruel. “Nos está pareciendo muy bonito, aunque faltan papeleras y está un poco descuidado el jardín”, observó.

El espacio resulta muy atractivo para todos los que se acercan a conocerlo y a algunos les gusta tanto que han repetido varias veces, como una familia de Calamocha que ayer se paseaba entre los Tres Cerditos y que ya es su cuarta visita. También para otros de Santa Eulalia pasar el domingo en Villarquemado se ha convertido en una gran diversión para padres e hijos y ya va la tercera visita que hacen el parque, según relataban ayer las encargadas de regular la entrada, Juan Locic e Isabel Lilao.

Tercer programa

El Ayuntamiento va a solicitar un tercer programa experiencial del Instituto Aragonés de Empleo para instalar algunos elementos más y adecuar las zonas ajardinadas, el aparcamiento y el entorno.

Todo lo que se ha llevado a cabo hasta ahora se ha hecho a través de dos talleres experienciales. El primero concluyó en octubre del año 2022 y formó a una docena de personas en albañilería. La inversión del Inaem se elevó a 298.000 euros, a los que hay que sumar la aportación de otros 50.000 por parte del Ayuntamiento para los materiales empleados. El segundo taller de empleo finalizó en enero de este mismo año y fue financiado por el Inaem con 366.000 euros, mientras que el consistorio se hizo cargo de los costes derivados de los materiales empleados, valorados en 120.000 euros.

El laberinto hecho con troncos finaliza en una torre a la que se puede subir. J. E.

Los alumnos del primer taller aprendieron principalmente el manejo de los materiales tradicionales, como cemento, hormigón o ladrillo. Sin embargo, en este segundo programa están utilizando sobre todo el mortero tixotrópico, que permite realizar reproducciones de texturas y de otros materiales como la madera o la piedra. Se utiliza habitualmente en la recreación de espacios temáticos y es el que posibilita que el visitante piense que esté dentro de un barco de madera cuando, realmente, está rodeado de cemento. Los alumnos aprendieron a utilizar los moldes, pigmentos y a manejar los tiempos de secado, que permiten ir modelando el mortero para que asemeje piedras o ladrillos.

El Paseo de Cuento genera un gran movimiento turístico los domingos, como constatan en el Bar La Plaza, ubicado en el centro del pueblo. Sus camareras reconocen que los días que abre se nota porque tienen la terraza llena de gente para tomar el vermú o comer.

El ajedrez con los espejos del cuento de Alicia es una de las novedades

En los próximos meses Villarquemado pondrá en marcha un albergue turístico con capacidad para 16 personas. El establecimiento está totalmente terminado, únicamente falta por obtener el permiso de conexión eléctrica, por lo que la previsión municipal es adjudicar enseguida su gestiono para ponerlo en marcha.

Está situado justo al lado del Paseo de Cuento, por lo que el Ayuntamiento quiere que la gestión de ambos espacios sea conjunta. Además de albergue, contará también con un restaurante con el objetivo de que tenga una mayor actividad. El alcalde comentó que han invertido un total de 400.000 euros en la rehabilitación del edificio, que se encontraba en estado de ruina.

El regidor de Villarquemado matizó que este inmueble llevaba muchos años sin utilizar, pero en el pasado tuvo diversos usos, desde establo para que el Ejército guardara sementales a albergue de transeúntes. Ahora buscan que ayude a dinamizar el pueblo con la llegada de turistas debido a la cercanía de recursos como Teruel, Albarracín o la vía verde.

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