Síguenos
Vicente Aguilera y Cirilo Comín, codirectores del documental 'Arnaudas, más allá del cancionero': Vicente Aguilera y Cirilo Comín, codirectores del documental 'Arnaudas, más allá del cancionero':
Vicente Aguilera, a la izquierda, y Cirilo Comín son los codirectores del documental

Vicente Aguilera y Cirilo Comín, codirectores del documental 'Arnaudas, más allá del cancionero': "Es inexplicable que Arnaudas y todas sus aportaciones en la música hayan caído en el olvido"

banner click 244 banner 244

Miguel Arnaudas (Alagón 1896-Zaragoza 1936) fue músico, pedagogo y una celebridad gracias a la publicación de su Colección de cantos populares de la provincia de Teruel (1927), un documento de incalculable valor etnográfico. Tras su muerte su figura cayó en el olvido, y ahora la productora El Kappa la rescata con el documental Arnaudas, más allá del Cancionero, que se proyectará este viernes, 14 de abril, en Mas de las Matas y más adelante en el Museo de Teruel.

-¿Por qué un documental sobre Miguel Arnaudas?
-Vicente Aguilera: Cuando el productor Carlos Bonal, que tenía parte de la investigación hecha, nos habló del personaje nos apasionó. Nos pareció increíble que no se conociera fuera de  los círculos académicos. Como productora tenemos el poder de divulgar figuras que nos parecen relevantes, así que decidimos hacerlo. Hacer un documental sobre alguien muy conocido está muy bien, pero hacerlo sobre alguien que casi nadie conoce es todavía mejor.

-¿Por qué Arnaudas cayó en el olvido?
-Cirilo Comín: Es inexplicable. Como compositor y músico trabajó en la Catedral de Salamanca, fue Maestro de Capilla en La Seo de Zaragoza, estuvo en la Real Academia de las Artes de San Luis, fue profesor y uno de los fundadores del primer Conservatorio de Zaragoza, sus escritor sobre pedagogía cambiaron la forma de enseñar música y se utilizan hoy en día, cien años después... Quizá como murió unos meses antes de la Guerra Civil el conflicto le eclipsó y se olvidó, o su propio Cancionero eclipsó el resto de su obra. Pero es de veras inexplicable.

-Ese 'Cancionero de Teruel' es su obra más conocida... pero fue su principal aportación?
-V. A.: El Cancionero fue importantísimo y tuvo mucha importancia en su época. Pero se suele olvidar su parte de pedagogo. Como compositor no fue Mozart ni un genio brillante, pero como pedagogo sí que se ha olvidado lo mucho que aportó. Tenía una visión muy humanista de la música y de la educación, y la abrió al ámbito laico, para todo el mundo.

-Arnaudas nació en Alagón. ¿Por qué el primero de sus Cancioneros fue el dedicado a la provincia de Teruel?
-C. C.: Realmente no se sabe. Él se movía mucho por círculos intelectuales por Alcañiz, con la familia Taboada, y quizá esa conexión le impulsó a empezar por ahí. Lo lógico es que hubiera comenzado por su entorno, pero la realidad es que se embarcó en eso y además pagando toda la investigación de su bolsillo. Tenía esa ansia etnográfica y archivística de visitar cada pueblo de Teruel para que sus canciones populares quedaran registradas y contextualizadas con sus anotaciones.

Patrimonio

-Ahora tenemos una percepción de la conservación del patrimonio que no existía a principios del siglo XX... ¿qué creen movió entonces a Arnaudas en ese énfasis preservador?
-V. A.: Miguel Arnaudas fue hijo de su época, y el Modernismo fue un momento en el que se ensalzaba un sentimiento nacional que también llegó a Aragón. Él quería demostrar que Aragón era importante en la música, quería que se conociera, supongo que movido por orgullo patriótico. Y al mismo tiempo sabía que en esas canciones populares había algo más que música, había parte de la identidad de cada pueblo.

-¿Qué recogía exactamente su Cancionero? ¿Melodías, letras, partituras completas...? ¿Cuál era su formato?
-C. C.: Recogía las canciones populares de cada pueblo, las que aprendía el hijo escuchando a su padre mientras labraba, o en tal o cual fiesta. Y el trabajo titánico de Arnaudas consistió en pasar esas canciones populares a partituras en un tiempo en el que no existían las grabaciones. Él iba al campo, donde estaban labrando, escuchaba lo que cantaban y lo escribía en partitura junto a las propias letras. Tardó muchos años en recoger todo el cancionero en un trabajo exhaustivo. Algunos expertos nos cuentan en el documental que siempre tendremos la duda de cuán fieles eran o no las transcripciones de Arnaudas a la música real de esas canciones. No hay otro registro de esas canciones así que no hay forma de comprobarlo. Sin embargo con los conocimientos musicales que él tenía es de esperar que fueran muy fieles, y de hecho cuando hemos grabado algunas piezas con Nacho del Río y Beatriz Bernal, hemos comprobado que tal cuál él las escribió, funcionan perfectamente. Y además de la letra y la partitura, Arnaudas añadía un montón de anotaciones etnográficas, sobre quién, cuándo y dónde se cantaba cada canción. Quizá eso suponga lo más valioso del libro.

-En la banda sonora del documental se recuperan canciones del Cancionero, pero se funden con música electrónica...
-Guillermo Aguilera, el sonidista, ha mezclado estos temas tradicionales que Arnaudas preservó con su versión más contemporánea, con sintetizadores y sonidos electrónicos, haciendo sus propias interpretaciones de misas de Arnaudas, por ejemplo. Es algo muy curioso y arriesgado, pero ya que se trata de un documental sobre alguien que rompió reglas y tabús, teníamos que romper nosotros alguno. Quisimos crear algo nuevo a partir de todo el patrimonio que nos dejó, porque creo que es el mejor homenaje que le podíamos hacer.

 

El redactor recomienda