“Me gusta venir al cole, pero también estar de vacaciones”

“Me gusta mucho venir al cole, pero también estar de vacaciones”, comentaba este lunes Paula Rajadel, de 6º de Educación Primaria en el CEIP Astrónomo Zarzoso de Cella. Además, comenzaba con muchas ganas porque confiaba en que fuera “un curso muy divertido”. Menos entusiasmo mostraba su compañero Marc Borrás, quien reconocía que no tenía ganas de volver y, además, le habían comentado que “sexto es más difícil que el curso anterior”. Eso sí, reconocía que tenía muchas ganas de ver a sus amigos porque había estado todo el verano prácticamente fuera, entre su pueblo, Torremocha del Jiloca, y la playa.

En las clases algunos docentes aprovecharon para hacer dinámicas propiciando que el alumnado se conociera y así integrar a los recién llegados, mientras que otros dedicaron la asamblea a relatar lo que han hecho durante el verano.

En una de las clases de 3º de Primaria, Paula contaba muy animaba sus vacaciones en Santillana del Mar: “Dormíamos en una Camper y estuvimos en muchos sitios”, decía. Alma también estaba entusiasmada porque durante el verano había “tocado delfines” y los describía como “muy suaves”.

Inversiones

En el Astrónomo Zarzoso se han invertido este año 49.000 euros en la renovación de los baños y de algunos puntos de luz que todavía no eran de led con el convenio entre el Gobierno de Aragón y la Diputación de Teruel. Además, se han arreglado unas luminarias del tejado por las que se colaba el agua, con el fin “de evitar humedades y riesgos de desprendimiento”, según indicó la alcaldesa de Cella, Carmen Pobo.

La regidora municipal señaló que el Ayuntamiento está muy pendiente de todas las peticiones que recibe del equipo directivo para reparaciones y destacó que recientemente se ha instalado el riego por goteo en el huerto que tienen los niños. “Estoy muy orgullosa porque tenemos un colegio muy cuidado”, dijo.

La directora del centro educativo, Celia Pascual, destacó por su parte que la mayor parte de las clases están desdobladas para prestar una mejor atención al alumnado, entre el que hay un elevado número de inmigrantes y también niños en programas de asilo a refugiados.

Además, los chavales cuentan este año con un rincón decorado con mimo junto a un gran ventanal para que puedan realizar allí clases especiales de lectura o de conversación, según explicó la directora del colegio.