Ánchel Conte, un poeta enamorado de Teruel

El pasado 22 de noviembre fallecía en Almería el que probablemente es el más grande poeta en lengua aragonesa, porque Ánchel Conte hizo del aragonés pilar fundamental de su bella e inmensa producción poética y a la vez nos hizo conscientes de otro de los grandes patrimonios culturales de Aragón, su riqueza lingüística; el próximo día 10 Aínsa abre los homenajes que la cultura y sus muchos amigos de la tierra van a desarrollar, en Primavera será Teruel quién acoja un homenaje a quien ejerció la docencia en la ciudad en los trascendentales años de la transición.

Destino Teruel

En 1974 ganó la plaza de lo que entonces se conocía como Enseñanza Media y se incorpora al instituto turolense (hoy Vega del Turia), llega a Teruel tras una importante trayectoria en Aínsa, donde establece criterios más vanguardistas en sus asignaturas y donde realiza una prolífica labor de recuperación de la lengua aragonesa, en aquel instituto los estudiantes provenían La Fueva, El Valle de Chistau, Bielsa y el Valle de Vio, su idioma vehicular era el aragonés, Ánchel Conte se esforzó por conservar la riqueza de esa lengua y replegar todo ese vocabulario, con estos precedentes su llegada a Teruel está marcada por un objetivo fundamental –arrojar de las aulas las formas represoras- y adecuar el estudio de la Historia a una actualidad que ya se presumía cambiante.

Docentes

Años atrás en ese mismo Instituto había impartido docencia José Antonio Labordeta iniciando junto a destacados miembros de la cultura englobados en la Generación Paulina un camino hacia un aragonesismo reivindicativo y cultural, con Ánchel Conte en Teruel años después llega hechos tangibles, el poeta había sido uno de los fundadores de la revista Andalán junto al andorrano Eloy Fernández Clemente, también había fundado el Consello d’a Fabla Aragonesa, impregnando de “lo aragonés” a un Teruel en tiempo previo a la Transición.

Sacrificio en Teruel

Decía Ánchel Conte que en Teruel había tenido que sacrificar mucha creación poética por la política, suya fue la misión de reorganizar el Partido Comunista en el que militaba en la provincia, un territorio que había sufrido como pocos, los destrozos de la guerra y en el que en 1974 (todavía bajo el régimen franquista) persistía el miedo.

Una provincia de pésimas carreteras y con los cauces de comunicación muy controlados por la Policía y Guardia Civil, una aventura de Ánchel y en la que hay que destacar la figura de Nacho Navarro, entonces trabajando en las minas primero de Utrillas y luego en la infraestructura de Andorra, con ellos concurrirían a las primeras elecciones democráticas Enrique Curiel, Blas Utrillas, Ángela Blasco y Carlos Luis de la Vega. La incipiente militancia fue dando forma a ese PCE todavía en la clandestinidad y que tras la legalización el 9 de abril de 1977 abriría su sede en pleno corazón del Arrabal, en lo que había sido uno de los locales más populares de Teruel, el Bar Yecla.

Recuerda Nacho Navarro que todo el trámite burocrático de la convocatoria electoral obligó a los miembros de la candidatura a significarse públicamente en un momento que definió como extremadamente delicado; Ánchel Conte recordaba siempre los encuentros con alcaldes de los pueblos para uso de instalaciones municipales para los mítines, algunos de esos contactos no estuvieron exentos de tensión, pero sobre todo confesaba su amor por la tierra turolense forjado aquellos años.

Poeta, pensador y melómano

Con No deixez morir a mía voz en 1972, Ánchel Conte comenzó una andadura poética que marco todo un hito, Gabriel sopeña pondría música al poema Mai, cantado por el propio Sopeña y Labordeta y que han versionado Olga y los ministriles, Elena Martínez o Manolo García entre otros, luego llegaría O tiempo y os días y la novela Aguardando lo zierzo, que ha sido traducida al castellano, al ruso o al francés, su último trabajo Calma ha visto la luz esta misma semana.

Su amor a la música era un sello característico a sus alumnos del Instituto turolense les introdujo al mundo de la Ópera.

El Ánchel Conte historiadornos ha permitido conocer mucho sobre los templarios oscenses y sus estructuras económicas, autor de referencia sobre la historia de los moriscos, hizo varias aportaciones sobre su presencia en las tierras del Altoaragón y los moriscos de Vera en Almería, cuyo trabajo ha visto la luz tan solo unos meses después de la marcha de Anchel; en el tema de los Moriscos es considerado una de las mayores autoridades del país, cuenta además con otras publicaciones sobre comunidades mudéjares en ciudades como Barbastro, con un total de más de cuarenta artículos sobre temas medievales. La obra poética de Ánchel Conte se encuentra en bibliotecas tan importantes como la de la Universidad de la Sorbona, Columbia en Nueva York o la Universidad de Harvard.

Angelito el del Cabo, como lo conocían en su pueblo natal

Nace Ánchel Conte en Alcolea de Cinca en plena posguerra, todo el pueblo lo conoce como Angelito el del cabo, de aquella infancia siempre hablaba de sus hermanos, de su amigo Antonier y de las trastadas en huertos y acequias; Alloza fue uno de los destinos de su padre cabo de la Guardia Civil, ahí coincidirá con otro niño prodigio de la cultura aragonesa Eloy Fernández Clemente, con el que forjará una amistad eterna, con proyectos como Andalán, es precisamente en la presentación en Aínsa un número de Andalán lo que interrumpirá su continuidad en el Instituto de de la capital del Sobrarbe y la expulsión de la provincia de Huesca según recoge la comunicación oficial del Gobernador Civil por comunista y maricón.

Una vez aprobada la ley Ánchel e Ignacio Barroso protagonizaron el primer matrimonio entre personas del mismo sexo que se celebró en la ciudad de Huesca, un hecho pionero que reflejaba uno de los postulados que han acompañado a Ánchel Conte toda su vida, la lucha por la libertad.