Artesanía local y figuras de autor andan juntas hasta el portal de belén de Torres

La Navidad de Torres de Albarracín cambió en el año 2011, el año en el que Roberto Belda cogió el bar-restaurante y dedicó un rincón del establecimiento a montar un pequeño belén con las figuras que él ya llevaba años coleccionando en Valencia. Desde ese momento la instalación fue ganando terreno hasta los 30 metros cuadrados que ocupa ahora en el salón municipal, ubicado en los bajos del Ayuntamiento de la localidad.

En el montaje de Torres de Albarracín hay figuras diseñadas específicamente por los mejores escultores de belenes de España. Algunas llegadas desde la localidad de Los Palacios, en Sevilla, creadas por los Hermanos Cerrada; otra, que representa a Coral y Manuel, la mujer y el hijo de Roberto Belda, esculpida por Javier Guilloto, que hizo a una madre bañando a un niño dentro de un barreño de barro. Las últimas incorporaciones son los Reyes Magos, que han sido totalmente renovados para esta Navidad y que han llegado desde el taller de José Luis Mayo Lebrija.
 

Mejorar la cabalgata real

Ahora ya tiene encargadas al mismo autor otras figuras porque el objetivo que se ha fijado es mejorar toda la cabalgata real, incorporando a todo el séquito. “Empiezo en el Pilar a montar mi belén y en ese momento ya es un poco tarde para pedir a los artesanos figuras específicas”, argumenta el belenista, que ya está perfilando el próximo pedido con el que mejorar el Nacimiento del año que viene y que llegue a tiempo.

Figuras con firma de autor que combinan con otras piezas en miniatura que adquiere en mercadillos especializados en belenes y otras que le fabrican expresamente para él algunos artesanos de la zona. Entre ellas están los cestos de mimbre que Pablo Polo, de Calomarde, teje con mimo para alegrar la Navidad a todos los que se acercan hasta el belén de Torres.

Junto con esas figuras de autor hay otras de barro lienzado “que son típicas de la región de Murcia”, apunta. Entre las esculturas las hay de 14, 17 y 20 centímetros, “son tamaños diferentes para poder dar la perspectiva al belén”.
 

Una carnicería con sus manos

A veces Roberto Belda hace sus propias instalaciones, como el nuevo puesto de carnicería, donde no faltan los animales listos para la venta, los embutidos o los jamones, que ha hecho con arcilla y ha pintado.

La Sierra de Albarracín es muy rica en agua y en el belén de Torres no podía faltar. Dos ríos, uno de ellos de nueve metros cuadrados y con agua en movimiento, jalonan la instalación.

Lo que recrea la instalación de Torres de Albarracín es el Misterio del Nacimiento, el pesebre, la Cabalgata de Reyes y la Anunciación de los Pastores: “Son las tres escenas bíblicas que represento”, comenta el artífice de la instalación, que añade que a todo eso incorpora “los oficios y las costumbres cotidianas” pero que no siempre tiene rigurosidad histórica. “Es un belén del estilo hebrero pero es popular porque se recrean cosas que no había en la época, como la trilla o carros de rueda que entonces no había”, apostilló el aficionado al belenismo.
 

Medios propios

Como las de otros muchos belenistas de la Ruta del Belén de Aragón, las figuras son todas propiedad de Belda y las nuevas incorporaciones las realiza con fondos propios. Para la instalación de las figuras cuenta con la ayuda de su propio hijo, Manuel, y de Miguel Sanemeterio, un vecino de Torres de Albarracín que también es aficionado al belenismo.

El Nacimiento de Torres está abierto todas las tardes de 18:00 a 20:00 horas, excepto los días 24 y 25 de diciembre y el 5 de enero, que permanecerá cerrado