Cabiria llega a su número 19 con la mirada puesta en Luis Buñuel y Emilio Casanova
El Cine Maravillas acogió este jueves la presentación de la revista turolense sobre el mundo del cineLa revista Cabiria cierra el 125 aniversario del nacimiento de Buñuel
La revista Cabiria cumple veinte años con un homenaje al cineasta José Miguel Iranzo
Desde la calavera de Buñuel que un periodista turolense sostuvo entre sus manos hasta la surrealista conversación de un cineasta con su fantasma en la cola de la panadería, el número 19 de la revista de cine turolense Cabiria cierra 2025, el año del 125 aniversario del nacimiento de Luis Buñuel, con un postrero homenaje al genio de Calanda.
Siempre que puede la revista Cabiria revisita a esa gran referencia, pero no se olvida de otras. En esta ocasión Emilio Casanova, videoartista zaragozano con raíces en Estercuel es otro de los grandes protagonistas del último número de la revista, junto a otros que van de Marilyn Monroe a Bob Esponja, pasando por Freddy Mercury o Hemingway.
El Cine Maravillas acogió anoche la presentación de este último número de la revista anual Cabiria, que mantiene su edición en papel, gracias a la financiación que desde 2020 asumió el Instituto de Estudios Turolenses, además de la digital a la que puede accederse desde hoy a través de la web del IET y del Cine Maravillas. La sala que regenta Nacho Navarro es la editora, mientras que TerueliGráfica se encarga del diseño y la impresión.
Bajo la gran pantalla del Maravillas se dijo este jueves, entre otras cosas, que es un milagro que un proyecto como Cabiria siga vivo casi veinte años después, y que si lo hace es porque hay muchos turolenses con muchas cosas interesantes que contar sobre el séptimo arte. De hecho cerca de medio centenar de nombres colaboran, de forma altruista, en la redacción de una revista que fundó el periodista Javier Millán y que en la actualidad dirige Gonzalo Montón. El listado incluye algunos de los nombres inevitables en el panorama del cine aragonés, y desde luego todos los del turolense.
Emilio Casanova
La figura del videoartista zaragozano Emilio Casanova es una de las protagonistas en el número número de Cabiria, y de hecho sobre su figura se centró la presentación de este jueves en el Maravillas. Durante unos cuarenta minutos se proyectaron algunos de sus audiovisuales, y el propio Casanova participó en una mesa redonda que se desarrolló con posterioridad, en la que también participó el periodista Carlos Gurpegui y Gonzalo Montón.
Casanova es objeto de un pormenorizado análisis en dos artículos que incorpora la revista, uno firmado por Nacho Navarro y Gonzalo Montón, y otro por la cineasta y agitadora cultural zaragozana Vicky Calavia, que ha trabajado con Casanova en alguno de sus proyectos.
Ambos textos pormenorizan el trabajo del aragonés, que ha desarrollado, a lo largo de más de cuatro décadas, una obra audiovisual centrada en la creación cultural y artística, con especial atención a figuras clave del arte y la cultura aragonesas. Entre sus trabajos más relevantes destacan Sauragramas (1991), un retrato videográfico innovador del pintor Antonio Saura premiado y exhibido internacionalmente; Goya: pintar hasta perder la cabeza (1995), concebido como una ópera videográfica que integra literatura, música, danza y artes visuales; y una amplia serie de proyectos dedicados a Francisco de Goya, como Goya. El cazador de sombras o Goya. Tristes presentimientos, en los que explora la dimensión ética, estética y contemporánea del pintor. A ello se suman sus trabajos sobre Luis Buñuel, concebidos tanto como instalaciones expositivas multicanal como montajes audiovisuales, y documentales dedicados a artistas y creadores como Ramón Acín, Pablo Gargallo, Rafael Navarro, José Luis Cano o Pilar Bayona, en los que combina investigación histórica y una puesta en escena de gran carga poética.
Buñuel, siempre Buñuel
Siempre que puede Cabiria aprovecha para revisitar la figura cumbre del cine turolense, Luis Buñuel, del que siempre existen nuevas facetas por analizar. En esta ocasión el homenaje, último de los que se dedican al calandino en el año del 125 aniversario de su nacimiento, está formado por 26 testimonios de otras tantas personas, estrechamente vinculadas a Teruel y al cine, en los que cuentan el origen de su pasión por Luis Buñuel, o alguna de las experiencias relacionadas con el director que han marcado su existencia. En la nómina pueden encontrarse nombres propios como Javier Macipe, Luis Alegre, Javier Millán, Ana Asión, Ester Llorens, Guillermo Chapa, Nacho Escuín, Paco Martín, Pimpi López, Ángel Petismo o Agustín Sánchez Vidal, entre otros.
Además en la sección de análisis Juan Villalba aporta una lectura comparada de El ángel exterminador conectando el universo buñueliano con la iconografía de Marilyn Monroe y la tradición pictórica de Goya. Explora la relación entre la crítica social, el encierro moral y la degradación de la burguesía en Buñuel, los fantasmas goyescos y la construcción mediática del mito femenino en Hollywood.
Y Javier Hernández-Gracia escribe Buñuel en Hollywood, analizando la etapa hollywoodiense de Buñuel desde una perspectiva histórica y profesional, alejándose tanto del mito romántico como de la caricatura del exilio frustrado. El artículo profundiza en las condiciones laborales, las limitaciones industriales y los aprendizajes técnicos que marcaron esta etapa, así como las tensiones entre el sistema de estudios y la personalidad creativa del director.
Los colaboradores turolense¡s Ángel Gonzalvo, Jesús Tena, Serafín Aldecoa y Víctor Aldea presentan tres nuevos capítulos de la serie Cines Turolenses de Antaño, en los que trazan la biografía histórica de tres espacios, en este número el cine de Urrea de Gaén, el Cine Victoria de Teruel y el Cine de Calanda.
Y entre las muchas curiosidades que aporta este número 19 de la revista Cabiria figuran un artículo de Clemente de Pablos Miguel en el que vincula la composición de Bohemian Rapsody, una de las obras cumbre de la banda británica Queen, al universo cinematográfico. En su texto analiza las influencias del cine clásico y del surrealismo en su composición, y demuestra cómo Freddie Mercury utilizó recursos propios del lenguaje cinematográfico para crear la obra musical.
El propio investigador y periodista, experto en el mundo del cine, aporta un sorprendente y bien argumentado artículo que vincula los personajes de Bob Esponja con los arquetipos de la Comedia del Arte. Se analizan paralelismos precisos entre personajes, estructuras narrativas y mecanismos cómicos, demostrando cómo la serie infantil reelabora tradiciones teatrales clásicas. El artículo destaca la inteligencia cultural del producto, algo por lo que muchos no hubieran dado ni un duro, y su capacidad para funcionar en múltiples niveles de lectura.
Artículos misceláneos
Otros artículos misceláneos hablan sobre el papel de los actores especializados en personajes monstruosos y cómo su interpretación física y gestual ha sido clave para dotar de humanidad y profundidad simbólica a esas criaturas, más allá de lo que se consigue gracias a los efectos especiales sintéticos (Elena Gómez Martínez), o sobre la representación de lo rural en el cine español contemporáneo, tomando como caso de estudio a Teruel, e incidiendo en el abandono de dos lugares comunes antitéticos; la idealización folclórica del mundo rural y la visión brutalista del campo (Pablo Pérez Rubio).
También destaca la conexión entre Hemingway y Por quién doblan las campanas con Aragón y en concreto con Albarracín (Francisco Lázaro Polo), la entrevista a la periodista turolense Carmen Marta-Lazo, vicerrectora de Comunicación e Identidad Institucional de la Universidad de Zaragoza (Carlos Gurpegui, la mirada desde dentro del Rally Desafío Buñuel que aporta el guionista y cineasta Guillermo Chapa, y una clarificadora visión sobre la alfabetización audiovisual de José Luis Bejarano titulada Enseñar a mirar, en la que pone de manifiesto la necesidad de alfabetizar audiovisualmente a los jóvenes para despertar su sentido crítico, en lugar de dejarle todo el trabajo a las grandes compañías tecnológicas que moldean los algoritmos en función de lo que quieren vender en cada momento.
El número 19 de la revista Cabiria cierra de nuevo con una sección en la que funde ficción y cine, con cuanto relatos breves ambientados en el séptimo arte. Son obra de Kakel Barraca (Festival canibal), Antonio Castellote (Alteración de la rutina), Vicky Calavia (El viaje insomne) y Héctor Montón (No olvides la cámara).
Grandes ilustraciones
Capítulo especial merecen las ilustraciones que aporta Cabiria, que se suman al abundante material fotográfico y que conforman un listado muy bien nutrido en el campo del diseño y del arte turolense actual. La portada es obra de Carolina Cañada, que hace un cover con su particular estilo -y que curiosamente saca partido de ese ojo, que es una de sus señas de identidad como artista- del fotograma más popular de Un perro andaluz. En páginas interiores la revista permite disfrutar del arte de Toni Alcaine, Germán Alcaine, David Sancho, Maggie Ballestín Manrique, Virginia Sierra Piti, Carola Hinojosa y Javier Hernández-Gracia.
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