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Caterina Burgos y Alberto Gamón, dos visiones diferentes del hecho amatorio Caterina Burgos y Alberto Gamón, dos visiones diferentes del hecho amatorio
Caterina Burgos y Alberto Gamón presentaron ayer sus obras en Teruel. Fundación Amantes / Javier Escriche

Caterina Burgos y Alberto Gamón, dos visiones diferentes del hecho amatorio

Los artistas presentan sus obras de la Caja de Arte de la Fundación Amantes
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Los artistas turolenses Caterina Burgos y Alberto Gamón comparecieron ayer en la Fundación Amantes de Teruel donde presentaron la sexta entrega de la serie artística colectiva perteneciente a la Caja de Arte con la que la institución celebró su 25 aniversario. La grabadora y el ilustrador conversaron con algunas de las personas que han adquirido dicha Caja de Arte, formada por copias serigrafiadas de obras de un total de doce artistas de muy variada índole, limitadas, numeradas y firmadas por otros tantos creadores turolenses -o muy vinculados a Teruel-, y que se distribuye por entregas periódicas desde el pasado mes de marzo.

Ayer fue el turno de Praecepta amoris, de Caterina Burgos, y de Pasiones, de Alberto Gamón. La primera de las obras recoge una de las piezas de la extensa serie en la que la Caterina Burgos, cuyo principal lenguaje expresivo es el grabado, lleva trabajando en los últimos años. Se trata de una revisión y de la fusión de varias series anteriores de la artista; Infancia, de (1994), Mujeres Escalera (2002), a la que pertenecía Escaleras invisibles, escaleras sin color, que ganó en 2003 el Premio Nacional de Grabado organizado por la Dirección General de la Mujer de la Comunidad de Madrid, y Maquinas inventadas, que Burgos realizó entre las dos anteriores inspirándose en Remedios Baro, “la gran olvidada del surrealismo”, como recuerda la turolense. Con el concepto de aquellas tres series en mente y un particular proceso creativo, que integra grabado con técnicas de aguafuerte y aguatinta y collage, Caterina Burgos juega con el grafismo aeiou, que apela directamente al amor maternal hacia los hijos. Ese grafismo construye la composición y sus texturas en una pieza, Praecepta amoris, cuyo título hace referencia al tópico del artista como preceptor y maestro en el arte del amor, y que tiene en Ars amatoria de Ovidio uno de sus primeras y principales manifestaciones.

Por su parte Alberto Gamón, ilustrador nacido en Alcañiz y afincado en Zaragoza, presenta Pasiones. Es una ilustración inspirada en su último trabajo editorial, la crónica sobre la Revolución Mexicana México Insurgente de John Reed, publicada por Nórdica en 2020. El autor aclara que no se trata de una de las ilustraciones que forman parte de ese libro ni de un descarte, sino que es una obra creada ad hoc para la Caja de Arte de la Fundación Amantes. Sin embargo Gamón estaba tan embebido en ese trabajo que decidió prolongar la estética que había trabajado en ese libro para confeccionar el encargo de la Fundación.

Tanto en el uso del cromatismo como en el estilo de dibujo geometrizado, Pasiones es una excelente muestra del estilo propio de Gamón, que además es fiel con su filosofía de que una ilustración se diferencia de un dibujo en que narra una historia. En este caso plasma ese tópico amoroso “que todos hemos experimentado alguna vez”, explica Gamón, “en el sentido de que sentimos como nuestro corazón está en poder de otra persona”.

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