El Pamesa Teruel pierde en Melilla para agravar su situación (3-0)

El Pamesa Teruel no levanta cabeza. El equipo de Maxi Torcello volvió a caer de manera contundente (3-0) ante un rival directo como es el CV Melilla, en un encuentro que se decidió por la efectividad del ataque local y por la irregularidad del bloque visitante, que volvió a sufrir una de sus desconexiones y protagonizó un tercer set para olvidar. La situación se complica en Los Planos, ya que el equipo se queda en la séptima posición a doce puntos del Unicaja, que ocupa la primera posición.

Empezó agresivo el Pamesa Teruel en busca de resultados y de sensaciones. Zelayeta se situó en zona 2 y conectó un remate potente que hizo subir el primer punto al marcador de la disciplina naranja. Pero la respuesta del Melilla no tardó en llegar. De hecho, uno y otro se respondían de manera insistente con ataques rápidos que ninguna de las dos defensas conseguía detener.
Durante los primeros compases, Guillem Pont, que se hizo con la titularidad, fue el referente turolense a la hora del bloqueo y de la colocación. Su juego hizo crecer al Pamesa y generó desesperación al otro lado de la red. No obstante, los aragoneses no conseguían zafarse en el marcador y la igualdad reinaba en el Javier Imbroda. El rally más largo de la tarde cayó del lado africano y sirvió para detener el buen arranque de los de Torcello (9-8).

Pese a ello, el equipo naranja no bajó los brazos y logró ponerse por delante en varias ocasiones. Zelayeta parecía ser el referente del equipo en una jornada en la que Miguel Ángel Martínez vio los primeros puntos desde la banda (11-11).

El primer tiempo muerto de la tarde llegó cuando el CV Melilla tomó dos puntos de ventaja. Torcello lo pidió para tratar de detener el buen momento de los locales, pero las soluciones tardaron en llegar. Más bien, el tema se complicó. A pesar de que los visitantes no estaban dejando una mala  imagen, el acierto de los de Abdelkader Salim era muy superior. Tanto que el CV Melilla logró ponerse con seis puntos de ventaja (19-13).

La reacción turolense llegó con la rotación de Guillem Pont y el buen rendimiento de Víctor Méndez en la red. El central celebró el decimosexto punto de los suyos, que los volvía a colocar a tan solo tres de su rival (19-16).

Como era de esperar por el marcador, los del norte de África fueron los primeros en alcanzar la veintena y eso le pasó factura al bloque dirigido por Maxi Torcello, que dio entrada a Rubén Lorente y a Miguel Ángel Martínez en busca de una remontada complicada en la recta final de set. Un bloqueo en red ante un ataque de Áxel Téllez y otro al opuesto colombiano hicieron que el primer set se lo quedaran los de casa (25-19).

A coletazos

El equipo estaba jugando mejor que en otras ocasiones, pero seguía sin encontrar solución a los problemas que le persiguen esta temporada. El primer servicio de la segunda manga se marchaba fuera, por lo que los turolenses empezaban perdiendo. No obstante, en las siguientes jugadas el bloque naranja sacaba su mejor versión, con una buena recepción, un bloque potente y un ataque sólido que permitía sumar varios puntos importantes. Vildósola entraba en acción y le daba a los suyos una renta de dos tantos, algo que no había sucedido hasta ese momento (4-6).

Pero el ataque local seguía poniendo en apuros a los de Torcello, que suelen hacer su mejor juego cuando cuentan con una ventaja algo mayor. Así pues, se pusieron a buscarla mediante el saque de Áxel Téllez, que aumentó la renta hasta las tres unidades. El banquillo local pidió pausa porque la situación se le estaba poniendo de cara a los de Teruel (6-9).

Una acción con cierta polémica en la que Zelayeta bloqueó y la pelota tocó la línea, pero el árbitro le dio el punto al CV Melilla desestabilizó un poco a los visitantes. Sin embargo, el rumbo para conseguir el empate era el que estaban mostrando en esta fase del encuentro.  Emilio Ferrández aparecía desde zona 4 una y otra vez tratando de evitar que se notase la ausencia de Miguel Ángel Martínez, que seguía en el banquillo. Sus puntos le daban vida a un Pamesa Teruel que alcanzaba el ecuador de la segunda manga con dos de ventaja en el electrónico (12-14).

Pero en un abrir y cerrar de ojos, la situación se le volvió a poner cuesta arriba al cuadro de Torcello, que tuvo que pedir un nuevo tiempo muerto cuando los melillenses conectaron un buen parcial y le dieron la vuelta al marcador (15-14). Víctor Méndez e Isaac Valiño se hicieron grande en la red para evitar que el CV Melilla sumase el segundo con facilidad. La dupla de centrales mantuvo vivo al equipo antes de llegar a los veintes. De hecho, Méndez puso el empate a 19 tras un nuevo bloqueo. 

A partir de ese momento, el bloque de Abdelkader Salim volvió a ser más efectivo y consiguió una ventaja que bien podía valer un set. El 21-19 obligó a Torcello a detener el encuentro una vez más, pero los dos puntos ya parecían una distancia demasiado grande para un equipo que se desconecta demasiado rápido cuando las cosas se tuercen. 
Vildósola evitó que la primera bola de set cayese del lado local, pero también fue el argentino el que intentó un bloqueo que terminó marchándose y poniendo el 2-0 en el marcador global (25-21).

Rendidos

El Pamesa ya solo podía sumar dos puntos, pero debía intentar conseguirlos si no quería meterse en problemas mayores. Zelayeta volvía a sumar el primer punto para los naranjas, pero los dos siguientes eran de color azul. El bloque de Torcello tenía que encontrar la forma para deshacer esa igualdad que estaba cayendo del lado melillense antes de que fuera demasiado tarde (3-3).
Sin embargo, fueron los de casa, una vez más, los que consiguieron ir haciendo camino hacia el triunfo a costa de los turolenses con varias acciones bien ejecutadas (7-4).

Con una desventaja de dos sets y un tercero que iba por mal camino, el equipo volvió a mostrar debilidad. Cada punto del Pamesa eran dos del CV Melilla y así se forjó el 12-8, que mandó a ambos bloques a un nuevo tiempo muerto.

El ataque turolense tampoco funcionaba y los errores eran cada vez más evidentes. La ventaja de los africanos ascendió hasta los seis puntos, por lo que el partido ya estaba prácticamente visto para sentencia (17-11).

Los de Abdelkader Salim llegaron al punto veinte con ocho de renta y la desesperación se apoderó de los turolenses. Poco más había que hacer en un Javier Imbroda que volvió a sacar a relucir las debilidades del equipo (21-12).

Víctor Méndez y Emilio Ferrández tiraron de orgullo para maquillar algo el resultado de una tercera manga que fue, sin duda, la peor de la tarde por parte de los de Torcello.  Aharón Gámiz dio motivos para creer a los suyos con dos buenas salvadas, pero la remontada era prácticamente una utopía. Los turolenses fueron capaces de llegar hasta los 17 puntos, pero el CV Melilla terminó cerrando un encuentro en el que el conjunto naranja volvió a sufrir de irregularidad (25-17).

En lo anímico, la derrota agrava la situación de un Pamesa Teruel languidecido que solo tiene un par de días para reponerse antes de enfrentarse a una nueva batalla que puede resultar definitiva, el miércoles ante el Pamvita Pomgrad en Los Planos.