El 80 por ciento de los visitantes del Museo de la Vaquilla son de Teruel

La mayor parte de los visitantes que pasan por el Museo de la Vaquilla son turolenses, vaquilleros y casi todos se sorprenden de todo lo que desconocían de la fiesta hasta entonces. Así lo aseguró la encargada de atender a los visitantes de esta galería, Patricia García, que este domingo, 1 de junio, abrió sus puertas una temporada más.

El Museo de la Vaquilla estará abierto durante los meses de junio, julio y agostó y los domingos ofrecerá, además, una visita guiada a las dependencias de la plaza de toros que no se ven cuando se acude a un festejo. Las visitas serán diarias durante la semana de Ferias.

García recordó que “este año se vuelve a abrir el Museo de junio a septiembre, todos los fines de semana y los domingos hacemos la visita guiada gratuita para conocer la plaza de toros y la historia dentro del museo de la Vaquilla”, apuntándose previamente por teléfono. “Lo que más sorprende son los espacios que habitualmente no se ven, como la enfermería o la capilla. Y la historia de la Vaquilla, que la gente no se le imagina”, aseguró la responsable.

García estimó que el 80 por ciento de los visitantes “es de Teruel”, y de esos, aseguró que “todos son vaquilleros”. Buena parte de los turolenses que recorren el Museo descubren una buena cantidad de información sobre la fiesta que no conocían. “Mucha gente llega pensando que lo sabe todo de la Vaquilla y al salir se reconoce que no tenía ni idea de los orígenes y tradiciones de la fiesta”, explicó Patricia García.

Los primeros visitantes desfilaron el primer día de apertura por la exposición. Entre los primeros curiosos de esta temporada, Vanesa Escriche reconoció haberse sorprendido por una fotografía de la fiesta de la Vaquilla tomada en 1900. “Es impresionante”, afirmó en la puerta del Museo, conmovida por conocer “cómo se vivía la vaquilla o lo que te puedes imaginar en aquel año, a mí se me ponen los pelos de punta”.

Vanesa acudió acompañada de su hermano Javier. Los son vaquilleros desde hace años y aseguran no perderse nunca la fiesta grande de la ciudad. “Somo vaquilleros de siempre, nos viene de mis padres, que son de la Peña Los Sordos”, apuntó Javier, que sonrió al recordar que había reconocido a un amigo suyo en una de las fotografías más recientes de la exposición.