Torre de las Arcas y Torres de Albarracín muestran que el medio rural sigue vivo

Torre de las Arcas y Torres de Albarracín fueron dos de las localidades que este sábado celebraron el Día Universal del Orgullo Rural con un extenso programa de actividades para demostrar que el mundo rural está más vivo que nunca y para reivindicar también la lucha colectiva en defensa del mantenimiento de los servicios públicos, entre los que destacaron la sanidad y el transporte.

Desde 2019, el 16 de noviembre se conmemora el Día Universal del Orgullo Rural, un movimiento nacido en las Cuencas Mineras que tiene como objetivo reivindicar la vida en los pueblos con una celebración “desde el medio rural para el medio rural”.

La jornada comenzó en la plaza Mayor de Torre de las Arcas con la lectura del pregón a cargo de Dani Gimeno y Luis Miguel Vela en nombre del Movimiento de Acción Rural (MAR). “Hoy no venimos a quejarnos, sino que venimos a celebrar”, dijo.

En el manifiesto, se reivindicó el mundo rural como “una forma de vivir con orgullo, con ingenio y con alegría”. Explicaron que en las Cuencas Mineras han sabido adaptarse, reinventarse y seguir adelante “con esa fuerza tranquila que solo da la tierra”.

Y destacaron que han conseguido mantener escuelas y centros médicos, entre otros servicios, y recuperar fiestas y tradiciones. “No somos la España vacía ni vaciada, somos la España llena, llena de alma, de esfuerzo y de futuro. Somos la España viva y necesaria”, dijeron.

No obstante, también aprovecharon la jornada para reivindicar mejoras en el transporte, las conexiones digitales y la sanidad pública para que los jóvenes no tengan que marcharse. “Necesitamos mantenernos fuertes en nuestra lucha colectiva”, afirmaron.

Los organizadores invitaron a los asistentes, entre los que había personas de toda la contornada, a pasear por el mercado y a participar en las actividades programadas, como la inauguración en el parque de un gran mural pintado por Roberto Morote.

Durante la mañana se sucedieron las charlas y mesas redondas, además de la dinamización infantil y juvenil. Por la tarde, el salón social acogió las actuaciones de Ixeya, Irene Gómez, Viki lafuente y los DJs Jesús Easy y Rollover Moreno, entre otras.

También se procedió a la lectura de un manifiesto en una jornada que se calificó como “la gran celebración de la vida en el pueblo”. Con menos de 20 habitantes durante todo el año, Torre de las Arcas mantiene su actividad social, cultural y empresarial “con sus escasos pero cercanos vecinos”, destacaron desde la asociación cultural Día Universal del Orgullo Rural.

Y por último, se sorteó una gran cesta de productos variados valorada en más de 500 euros llena de productos artesanos y locales gracias a la colaboración de los productores participantes.

Torres de Albarracín se sumó a la conmemoración del Día Universal del Orgullo Rural con una serie de actividades organizadas por los propios vecinos, pero en las que también participaron personas de otras localidades de la comarca.

La mañana comenzó con el frito, y los asistentes pudieron degustar un plato de conserva con longaniza, lomo y costilla acompañado de un huevo frito. Al mediodía, hubo una caldereta de ciervo en cuya elaboración participaron los cazadores de la localidad.

Desde la organización, Roberto Belda destacó que habían contado con una 70 personas a primera hora y un centenar a la hora de comer, “lo que superó nuestras expectativas”.

Las condiciones meteorológicas permitieron el desarrollo de todas las actividades previstas durante la mañana, entre las que destacó la elaboración de una talla de madera que representa la cabeza de una mula en recuerdo de las caballerías usadas durante siglos para realizar las labores del campo en la España rural. Hubo una exhibición del trabajo con ellas y los niños y niñas pudieron montar en los animales. Y también un taller de alfarería a cargo de Eloy Moreno.

Al mediodía, los jóvenes de Torres de Albarracín leyeron un manifiesto en el que solicitaron más servicios en los pueblos. En este sentido, Belda aprovechó para reclamar una mejor sanidad pública en el medio rural y puso como ejemplo que la Sierra de Albarracín lleva un año sin pediatra, por lo que tienen que llevar a los bebés y niños y niñas a las revisiones a Teruel.